miércoles, 9 de marzo de 2022

APROPIACIÓN INDEBIDA, Malaquías 3:8-9

APROPIACIÓN INDEBIDA, Malaquías 3:8-9

¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas. Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado. Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.
Malaquías 3:8-10

Parecía larga la lista de confrontaciones por medio de Malaquías y, como todavía nadie parecía sentirse aludido, se reprenderá al pueblo por dos tansgresiones más.

En este caso, Dios reprocha que se le haya robado lo que es Suyo.

Porque, ya para empezar, Israel llegó a existir por pura providencia de Dios, por la cual hizo salir a Abram de en medio de la idolatría y le dio una descendencia poniendo vida en la matriz seca de su anciana mujer Sara. De un hombre creó toda una nación, por la que tenía que nacer el Mesías.

Fue Dios quien los mantuvo en Egipto usándose de José, de manera que de setenta que entraron, salieron dos millones, y no por sus propios medios, sino por Su mano fuerte y por Su brazo extendido.

Una vez librados de faraón y tras cuarenta años de rebeldía en el desierto, Dios les encaminó hacia la tierra prometida por medio de Josué, abriéndoles el Jordán, como en su día sucedió con el Mar Rojo, para darles en posesión tierras fértiles, tal que Dios dice que en ellas fluye leche y miel.

No contentos con esto, pidieron ser gobernados por rey humano, teniendo el privilegio de ser la única nación en el mundo dirigida y sustentada por Dios, el Creador de todas las cosas. Su deseo le fue concedido, y vivieron los días más gloriosos durante los reinados de David y Salomón, su hijo.

Pero los siguientes, en su mayoría, no supieron compaginar el poder sobre el trono terrenal con el sometimiento a la voluntad de Dios y todas sus riquezas iban a parar a los baales.

El día llegó en que Dios permitió que fueran deportados a Babilonia y  dispersados por tierra ajena mientras Jerusalén era destruída por completo.

Vueltos en arrepentimiento, Dios se trajo de vuelta a un remanente, el que por Zorobabel y Nehemías, con Esdras de sacerdote, restauró la ciudad con el templo y sus muros, y se restituyó la ley en juramento fiel y firmado por los principales y sacerdotes.

Bendecidos en protección y provisión, no tardaron en volver a romper el pacto que juramentaron, entre llanto y alabanzas, ya que les bastó una corta ausencia de Nehemías para meter a Tobías, enemigo de Israel, a habitar dentro del templo de Dios.
Fue sacado de ahí tan pronto se enteró Nehemías, una vez vuelto en un permiso del rey. Y ahora aún se extrañaban de que este Malaquías les reprendiera por todos estos pecados, como si no tuvieran nada que ver con ninguno de ellos.

Y eso, a pesar de que no habían estado ofrendando ni diezmando según marcaba la ley, para el buen mantenimiento del templo y de la ciudad, conforme a la voluntad de Dios. Y por cuanto Él les dió para que así se hiciera, sino que ellos más bien prefirieron apropiárselo para sus intereses personales.

No obstante, aún Dios les ofrece una muy suculenta enmienda si es que, finalmente, reconocen sus pecados y se vuelven a Él en obediencia.

Porque Dios no confronta a nadie si no es con ánimo de que éste se corrija, porque ¿a qué confrontar al condenado? ¿no le bastará ya con la condena?

Pero al pueblo de Dios no le faltan las oportunidades y aún las volverán a tener hasta que el Señor vuelva.

Porque algo más de cuatro siglos después de Malaquías, el Señor vino y habitó en medio de ellos, pero los suyos no le reconocieron. Fue entregado a muerte en la cruz del Calvario, donde se dió a Sí mismo para salvarnos, en pago por nuestros pecados con su muerte y en su resurrección al tercer día, para pasarnos de muerte a vida eterna en Él. Ascendió a la diestra del Padre y volverá, ya no para entregarse de nuevo, sino para regir en toda Su gloria con toda justicia.

Desde entonces todo aquel que en Él cree  recibe una nueva vida en Cristo y una nueva identidad, siendo adoptado como hijo de Dios y bautizado con el Espíritu Santo en el cuerpo de Cristo, que es la iglesia. En este momento adquirimos la vida y todo lo necesario para ella, por toda la eternidad.

Habiendo sido hechos suyos, andamos en plena disposición de Cristo, por cuanto nuestra vida está guardada en Él, y ya no es nuestra, sino suya.

"Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas."
Efesios 2:10

Porque, ¿existe un mayor privilegio que el de ser habitado por Dios en Su Santo Espíritu, siendo puestos por morada de Su gloria?

"Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad."
Colosenses 2:9-10

Completos en Él, y no hay más ni mayor privilegio que éste, el de la plenitud en Cristo. Y no dice Pablo que nosotros "estaremos" o "llegaremos a estar" o quizá "podamos llegar a estarlo", no. Pablo dice que nosotros "estamos" completos en Él, una obra hecha y de acción continua.

Podemos concluir que todo lo que somos y tenemos proviene de nuestro Señor y Dios, el Creador y Proveedor de todas las cosas, y que sin Él nada somos, es más, ni siquiera hubiéramos podido llegar ni a existir.

¿Estamos siendo conscientes del buen uso de lo que se nos ha dado en Cristo, para administrarlo según Su voluntad, o estamos cometiendo apropiación indebida?

Personalmente creo que aún me queda mucho por aprender de nuestro Maestro y Salvador, el Señor Jesucristo, de quien tomo como ejemplo estas palabras de Su oración intercesora por todos los santos:

"Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para que la Escritura se cumpliese."
Juan 17:12

Guárdame, Señor, de echar a perder nada de lo que Tú me has dado. 






















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