LENTA RESTAURACIÓN, Esdras 10:16-17

LENTA RESTAURACIÓN, Esdras 10:16-17

Así hicieron los hijos del cautiverio. Y fueron apartados el sacerdote Esdras, y ciertos varones jefes de casas paternas según sus casas paternas; todos ellos por sus nombres se sentaron el primer día del mes décimo para inquirir sobre el asunto. Y terminaron el juicio de todos aquellos que habían tomado mujeres extranjeras, el primer día del mes primero.
Esdras 10:16-17

REFLEXIÓN:

Llama poderosamente la atención que para desobedecer la ley de Dios sólo basta con un primer pensamiento y una primera acción que la lleve a cabo, mientras que para restaurar la situación se presenta como una tarea más lenta y dolorosa, por cuanto implica sacrificio, tiempo y daños colaterales.

Porque los jefes y principales que pecaron fueron los primeros que, en genuino arrepentimiento, se ofrecieron a cortar por lo sano con sus vidas desordenadas, dejando a sus mujeres extranjeras e hijos frutos de la relación en sus tierras y viniéndose a Jerusalén donde ofrecerían en sacrificio un carnero.

Pero esta restauración no iba a durar unos pocos días, además de las inclemencias de un tiempo lluvioso que no ayudaba en mucho a todos los que quedarían expuestos a la interperie, por lo que se tuvo que escalonar el restablecimiento a la ley según las posibilidades estructurales de Jerusalén en aquel momento.

En cuanto a los daños colaterales quizá en el momento no se aprecien, pero todos los niños nacidos de las mujeres extranjeras tienen muchos números de convertirse en futuros enemigos potenciales de Israel, a causa del resentimiento por el abandono de sus padres para volverse a la ciudad.

APLICACIÓN:

A Adán no le hizo falta invertir mucho tiempo, sino más bien es que no invirtió ninguno en meditar en las consecuencias de lo que iba a hacer.

Lo que tardó en agarrar el fruto y darle un bocado provocó que la muerte tomara parte en toda la creación y generación tras generación.

Y aunque Dios ya tenía trazado un plan de rescate desde antes de la fundación del mundo, según el hombre está atado a la ley del espacio y del tiempo, (no así Dios que es Eterno), a la humanidad le costó algo así como cuatro milenios hasta que naciera el Mesías y restaurara, con su muerte y su resurrección, la relación que Adán había perdido con su Creador el día en que cayó en pecado.

La restauración del alma ya es posible en Cristo, pero aún no será hasta cumplido el milenio del establecimiento del reino del Señor sobre la tierra, que toda la creación será totalmente devuelta al estado de bondad en que Dios la creó, para el uso y disfrute del hombre y para la gloria y honra de su Creador.

ACCIÓN:

Mi experiencia personal ratifica que cuando un creyente se obceca en vivir desordenadamente, cuando su conciencia es por fin golpeada, esto suele ser más a causa de disciplina, llega la restauración, pero en el camino se han perdido unos pasos, se han desaprovechado oportunidades, han habido daños colaterales...

Mi experiencia indica que cuando un creyente cae en una transgresión que se alarga en el tiempo, la sabiduría que Dios le dió se torna necedad a causa del alejamiento, y el rebelde acaba dando palos de ciego en la vida, en la práctica de la fe cristiana y en el entendimiento de la Palabra de Dios.

Hoy es día de cortar por lo sano con todo desorden y sacrificar el tiempo que el proceso se va a llevar por delante, y todos aquellos planes y oportunidades que un día puso el Padre en bandeja y no supimos aprovechar...

Todo sea para una total restauración.

Por el momento gracias, Padre Amado, por sostenerme y traerme de nuevo hacia Ti.

"Se llenó de amargura mi alma, y en mi corazón sentía punzadas. Tan torpe era yo, que no entendía; Era como una bestia delante de ti. Con todo, yo siempre estuve contigo; Me tomaste de la mano derecha. Me has guiado según tu consejo, y después me recibirás en gloria. ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra. Mi carne y mi corazón desfallecen; Mas la roca de mi corazón y mi porción es Dios para siempre."
Salmos 73:21-26