ARTIMAÑAS E INTENCIONES, Esdras 4:1-4

ARTIMAÑAS E INTENCIONES, Esdras 4:1-4

Oyendo los enemigos de Judá y de Benjamín que los venidos de la cautividad edificaban el templo de Jehová Dios de Israel, vinieron a Zorobabel y a los jefes de casas paternas, y les dijeron: Edificaremos con vosotros, porque como vosotros buscamos a vuestro Dios, y a él ofrecemos sacrificios desde los días de Esar-hadón rey de Asiria, que nos hizo venir aquí. Zorobabel, Jesúa, y los demás jefes de casas paternas de Israel dijeron: No nos conviene edificar con vosotros casa a nuestro Dios, sino que nosotros solos la edificaremos a Jehová Dios de Israel, como nos mandó el rey Ciro, rey de Persia. Pero el pueblo de la tierra intimidó al pueblo de Judá, y lo atemorizó para que no edificara.
Esdras 4:1-4


REFLEXIÓN:

Porque la mejor manera de frustrar una tarea es involucrarse en ella, los enemigos no se lo pensaron dos veces para ofrecerse como ayuda activa, no solo en la edificación del templo, sino también en la entrega de sacrificios.

Como no, esos sacrificios tenían como trasfondo un homenaje al rey asirio que mandó al exilio a parte de las tribus de Israel para hacerles habitar en sus tierras.

Así que el plan de ellos hubiera surtido efecto, siendo que habiendo participado en las labores de edificación y en los sacrificios (corrompidos en su intención), se verían con todo el derecho de reclamar parte con los hijos de Judá y Benjamín y en cualquier momento podrían volver a ser echados fuera, boicoteados desde adentro.

Así que Zorobabel no consintió en el ofrecimiento, y aún se asió de la mención a Ciro, para hacer constatar delante de ellos el salvoconducto que los amparaba.

Claro, la cosa no se iba a quedar ahí, porque una vez recibida la negativa, al enemigo no le queda otra que mostrar su verdadera intención, y esta vez con amenazas, amedrentaban directamente al pueblo para hacer cesar su obra.

APLICACIÓN:

Este es el modus operandi del adversario. Porque no va a venir Satanás vestido de rojo, con cuernos, capa y rodeado de fuego diciendo: "¡Uh! ¡Soy el enemigo, y vengo a ponerte una trampa!", no.

Él sin embargo utiliza el juego de la mimetización, imitando el correcto proceder, para ir introduciendo sigilosamente el veneno que vaya afectando a todo el organismo desde dentro.

Ya sabemos, desde que se rebeló en los cielos, de la cobardía de éste. Que queriendo hacerse un trono a la altura de Dios y asemejarse a Él, y robarle la gloria de los ángeles para apropiarse de ella, no se mostró de forma directa. Sino que, en lo escondido de las difamaciones, iba extendiendo poco a poco, entre los ángeles, aquello que trataba de desacreditar al Altísimo.

Sabemos también el resultado, que habiéndole dado oído la tercera parte del ejército celestial, éstos se convencieron del engaño y, envenenados por él, se levantaron contra Dios y sus ángeles.

El final de todo esto está escrito, así como sabemos que en consecuencia a esta rebelión fueron expulsados para siempre de la presencia de Dios.

No conforme, consiguió hacerse con el dominio terrenal tras embaucar a Eva en el engaño, cayendo Adán detrás de ella y perdiendo así la potestad que Dios le había otorgado por sobre toda criatura habida bajo el firmamento.

Advertidos estamos, y en el libro del Cantar de los cantares, Salomón no deja de hacer mención a este aviso, porque siempre uno ha de estar alerta, incluso en medio del tan dulce desarrollo del amor que plasman las letras de este escrito:

"Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas; Porque nuestras viñas están en cierne."
Cantares 2:15

A modo de zorras pequeñas que se cuelan entre el viñedo, va a ilustrar cómo es que actúa el enemigo. Porque una vez metidos en medio del cultivo, estos pequeños animalitos no se pueden apreciar. Pero a esta alimaña le gusta la fruta y es un gran devorador de ella. Así que una copiosa y sana viña puede verse seriamente afectada en cuestión de días con que sólo uno de estos pequeños intrusos se cuele en medio de ella.

También hallamos otra ilustración más práctica por boca de Pablo, en prevención de que el cuerpo se vea corrompido y la acción de la iglesia se entorpezca a causa de haber dejado al enemigo entremeterse en las labores:

"No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Dios, Y ellos serán mi pueblo. Por lo cual, Salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, Y no toquéis lo inmundo; Y yo os recibiré, Y seré para vosotros por Padre, Y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso."
2 Corintios 6:14-18

En esta ocasión el apóstol se usa de un yugo para escenificar qué pronto se puede echar a perder un campo labrado de forma irregular. Con dos animales distintos enganchados del mismo artilujio de labranza, ambos van a tirar cada uno por su lado, no a la par, pues cada especie se motiva de algo diferente al pisar el terreno.

ACCIÓN:

La Palabra de hoy me insta a prestar atención y a examinar si estoy dando pie a que un boicot se pueda dar en medio de mi caminar en Cristo.

No está de más que analice aquellos momentos en que el desánimo toca a la puerta de mi vida, para tomar la determinación de que esa puerta no se abra, asiéndome de Cristo, el perfecto salvocontucto que me ampara.

Y por si acaso alguna suculenta oferta de ayuda secular se interfiere en mis labores espirituales, me sirvan estas reflexiones para no dejarme embaucar en lo que más que una ayuda acabará siendo un tropiezo.

Cierro mi reflexión con el siguiente pasaje:

"No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar."
1 Corintios 10:13