martes, 31 de agosto de 2021

PALABRA PROFÉTICA, Deut. 18:15-18

PALABRA PROFÉTICA, Deuteronomio 18:15-18

Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te levantará Jehová tu Dios; a él oiréis; conforme a todo lo que pediste a Jehová tu Dios en Horeb el día de la asamblea, diciendo: No vuelva yo a oír la voz de Jehová mi Dios, ni vea yo más este gran fuego, para que no muera. Y Jehová me dijo: Han hablado bien en lo que han dicho. Profeta les levantaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare.
Deuteronomio 18:15-18

REFLEXIÓN:

Ellos mismos se privaron en Horeb y privaron a toda su descendencia, por la dureza de sus corazones, del haber tenido la oportunidad de acercarse a Dios y hablar con Él por temor a Su voz como de trueno y al fuego, pequeña muestra de Su gloria y poder. 

Y es que Dios no anda mendigando la  atención del hombre, pues es soberano, autosuficiente. El pueblo lo decidió así, pues ya no podrá recibir palabra de Él directamente, sino que a profetas enviará en Su nombre y por boca de ellos se hará escuchar en Su pueblo.

APLICACIÓN:

Gracias a Dios, hoy día (salvo excepciones, en lugares donde el evangelismo está penado con muerte), tenemos fácil acceso a la Palabra de Dios ya sea en formato impreso o digital, que nos permite estar al día con lo que Dios quiere hablarnos a nuestras vidas.

Lamentablemente no valoramos como debiéramos este gran privilegio, sino que vamos limitando la lectura Bíblica a los minutos libres que nos sobren después de toda actividad diaria, incluído el descanso. O dejándola por completo, esperando a que sea el mensaje dominical el que hable a nuestros corazones.

Pero esta práctica, a la vez de mantenernos estancados en el crecimiento espiritual, también es muy peligrosa, ya que acabamos atribuyéndole al pastor las funciones de un profeta, cuando no estamos prestando a la Palabra de Dios la atención que se merece, ni tan sólo para usarla como filtro donde examinar el sermón del domingo.

En la actualidad la suficiencia de las Escrituras nos asegura una sana base doctrinal donde asentar nuestra fe, agarrándonos en el forjado fundamental en Cristo, por medio de la labor apostólica y profética del primer siglo de la era Cristiana, de los apóstoles escogidos por el Señor Jesucristo, incluído Pablo.

Pedro nos insta a que sean las Escrituras y solamente ellas las que iluminen nuestros pasos en el caminar en Cristo, y no nos dejemos deslumbrar por algo nuevo que no esté plasmado en ellas, diciendo:

"Porque no os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo siguiendo fábulas artificiosas, sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad. Pues cuando él recibió de Dios Padre honra y gloria, le fue enviada desde la magnífica gloria una voz que decía: Este es mi Hijo amado, en el cual tengo complacencia. Y nosotros oímos esta voz enviada del cielo, cuando estábamos con él en el monte santo. Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo."
2 Pedro 1:16-21


Dios sigue hablando al hombre. Pero si todo lo que le ha de decir está en la Biblia, y la tenemos a mano, no va a hacer venir a un profeta para decírnoslo, pues está en nosotros abrir la Biblia y leerla.

Los hijos de Dios tenemos el Espíritu Santo morando en nosotros, Él nos guía, aconseja, nos confronta, corrije y consuela, conforme a la voluntad de Dios y al carácter de Cristo. Esta es la función del Espíritu Santo, conforme a la Palabra de Dios. Y conociendo el corazón de Sus hijos, sabe tratar específicamente con cada uno. Si ese trato ha de ser de carácter público, ya aparece plasmado en la Biblia, basta con leerla y ponerla en práctica. Porque el propósito principal de Dios en Su palabra es el de darse a conocer claramente a todos los hombres, no el de ir de secretos exclusivos ni de palabras escondidas no reveladas a los demás. 

Y como que Dios no se contradice a Sí mismo,  tenemos la Biblia a mano para examinarlo todo,  de manera que si hay confrontación en algo, lo que prevalecen son las Escrituras.

Justin Peters dió un consejo que se ha popularizado dentro del cristianismo, y tiene mucha razón, que dice así:

"Si quieres que Dios te hable, lee la Biblia. Si quieres que te hable en voz audible, léela en voz alta."

ACCIÓN:

Leído y meditado, no quiero hacer como el pueblo en Horeb, que pudiendo escuchar directamente la voz de Dios, prefirieron filtrarlo a través de un hombre.

Tengo la oportunidad diaria de que Dios hable directamente a mi vida, a través de Su palabra escrita y me pregunto si estoy aprovechándola o mi comportamiento es como el pueblo, mientras pienso: "ya me hablará Dios a través del pastor durante el mensaje del domingo".

Mientras tanto me respondo, aporto el siguiente pasaje:

"Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra."
2 Timoteo 3:16-17






lunes, 30 de agosto de 2021

SUPREMA HEREDAD, Deut. 18:1-5


SUPREMA HEREDAD. Deutereonomio 18:1-5 

Los sacerdotes levitas, es decir, toda la tribu de Leví, no tendrán parte ni heredad en Israel; de las ofrendas quemadas a Jehová y de la heredad de él comerán. No tendrán, pues, heredad entre sus hermanos; Jehová es su heredad, como él les ha dicho. Y este será el derecho de los sacerdotes de parte del pueblo, de los que ofrecieren en sacrificio buey o cordero: darán al sacerdote la espaldilla, las quijadas y el cuajar. Las primicias de tu grano, de tu vino y de tu aceite, y las primicias de la lana de tus ovejas le darás; porque le ha escogido Jehová tu Dios de entre todas tus tribus, para que esté para administrar en el nombre de Jehová, él y sus hijos para siempre.
Deuteronomio 18:1-5 

REFLEXIÓN: 

Dios deja a los levitas sin parte ni heredad en Israel. Los sacerdotes se alimentarán de lo ofrecido a Jehová, de la ofrenda quemada y de las primicias, porque tienen heredad suprema, la cual es Dios mismo. 

Y el Señor los pone como perpetuos administradores en Su nombre. 

Y esto iba a requerir de fe por parte de ellos, de una muestra genuina de su confianza con Dios, puesto que, de lo que se vé, nada iba a ser de ellos, sino lo que no se vé, no palpable, de carácter Eterno y valor insuperable. 

Sobre esta esperanza, el autor de la carta a los Hebreos va a destacar a algunos de quienes la profesaron para fortalecer su identidad en Cristo ante las persecuciones y las continuas amenazas para que negaran públicamente su fe. 

"Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba. Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa; porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios." 

"Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria; pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad."
Hebreos 11:8-11 y 13-16 

Puesto que la tribu de Leví, de entre las doce, fue  la única que manifestó una plena confianza con respecto a la promesa de Dios a la salida de Egipto, los levitas van a representar el sacerdocio, la consagración y la herencia eterna. 

APLICACIÓN: 

La confianza en la obra redentora consumada por Cristo en la cruz del Calvario, reconociendo que Jesús es el Señor, que resucitó al tercer día y ascendió a los cielos hasta la diestra del Padre, va a ser ahora, por la gracia de Dios, la que nos aparta del resto de la humanidad, haciendo de nosotros un sacerdocio consagrado en Cristo para Él, y dándonos la mayordomía de toda la provisión llevando el evangelio de  Jesucristo al mundo. 

"Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia."
1 Pedro 2:9-10 

Y como este linaje escogido que conformamos la iglesia, en el disfrute de la plenitud en Cristo y de la administración de Su luz, Pedro nos recuerda que de nuestra actitud depende el testimonio y, en consecuencia, el fruto del evangelio. Y por tanto, al igual que los levitas estaban claramente diferenciados del resto de las tribus, desde sus funciones, vestiduras y hasta su alimentación, nosotros debemos marcar también esta diferencia. 

"Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma, manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras."
1 Pedro 2:11-12

ACCIÓN: 

En la lectura de hoy, centrándome en la suprema heredad, me ha surgido a la mente las siguientes palabras que dió el Señor a sus discípulos: 

"No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino. Vended lo que poseéis, y dad limosna; haceos bolsas que no se envejezcan, tesoro en los cielos que no se agote, donde ladrón no llega, ni polilla destruye. Porque donde está vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón."
Lucas 12:32-34 

Y te animo a hacer un ejercicio de introspección, apropiándote de mi pregunta: ¿Dónde está mi corazón? 

Sirva este verso para cerrar mi reflexión: 

"Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre."
1 Juan 2:17

domingo, 29 de agosto de 2021

UN REY COMO DIOS MANDA, Deut. 17:14-20


UN REY COMO DIOS MANDA, Deuteronomio 17:14-20. 

Cuando hayas entrado en la tierra que Jehová tu Dios te da, y tomes posesión de ella y la habites, y digas: Pondré un rey sobre mí, como todas las naciones que están en mis alrededores; ciertamente pondrás por rey sobre ti al que Jehová tu Dios escogiere; de entre tus hermanos pondrás rey sobre ti; no podrás poner sobre ti a hombre extranjero, que no sea tu hermano. Pero él no aumentará para sí caballos, ni hará volver al pueblo a Egipto con el fin de aumentar caballos; porque Jehová os ha dicho: No volváis nunca por este camino. Ni tomará para sí muchas mujeres, para que su corazón no se desvíe; ni plata ni oro amontonará para sí en abundancia. Y cuando se siente sobre el trono de su reino, entonces escribirá para sí en un libro una copia de esta ley, del original que está al cuidado de los sacerdotes levitas; y lo tendrá consigo, y leerá en él todos los días de su vida, para que aprenda a temer a Jehová su Dios, para guardar todas las palabras de esta ley y estos estatutos, para ponerlos por obra; para que no se eleve su corazón sobre sus hermanos, ni se aparte del mandamiento a diestra ni a siniestra; a fin de que prolongue sus días en su reino, él y sus hijos, en medio de Israel.
Deuteronomio 17:14-20 

REFLEXIÓN: 

(Nadie mejor que Dios conoce el corazón del hombre y hacia dónde van encaminados sus deseos.) 

Dios sabe que tarde o temprano el corazón de Su pueblo le pedirá someterse a un rey de carne y hueso, como ellos y como el resto de naciones vecinas. 

Como dice la traducción de la NVI en Probervios 16:1: "El hombre propone y Dios dispone". 

Así que si al pueblo le dá por proponer un rey sobre sus cabezas, Dios va a disponer del que a Él le plazca poner en el trono, según Su perfecta voluntad. 

Y este rey aún habiendo subido a reinar por designio Divino, va a tener que acatar una serie de requisitos para catalogarse como un rey como Dios manda, guardando su corazón de maldad. Nutriéndose a diario de cada palabra plasmada en la ley de Moisés, que mantendrá su corazón humilde,  recto y próspero conforme a la voluntad de Dios. 

Y aquí vemos una pequeña muestra del perfecto rey descrito en el primer Salmo, y conforme a la instrucción dada al pueblo para con la actitud de su futuro monarca. 

"Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,Ni estuvo en camino de pecadores,Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; Sino que en la ley de Jehová está su delicia,Y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas,Que da su fruto en su tiempo,Y su hoja no cae;Y todo lo que hace, prosperará."
Salmos 1:1-3 

APLICACIÓN: 

Después del gran privilegio de ser el único pueblo conducido directamente por Dios, Israel acabó prefiriendo ser gobernado por un rey humano, como el resto de los países vecinos. 

Y aunque hoy día obtenemos muchísima enseñanza de cómo debemos actuar y qué actitudes evitar,  según los ejemplos de los reyes en la historia de los reinos de Israel y de Judá, en el transcurso contemporáneo de la sucesión de cada rey, al pueblo le supuso  sufrir directamente la voluntad de aquél que sostenía la corona en su cabeza, con sus errores y aciertos y con las consecuencias de los mismos. 

Pero Dios que es Soberano ha preparado al Perfecto Rey que gobernará para siempre y no solamente sobre Israel, sino sobre todas las naciones. 

Este Rey es Jesús de Nazaret, el Hijo enviado quien, siendo Dios, nació, vivió y se entregó como hombre, pagando con su muerte el precio que debíamos pagar nosotros por nuestros pecados. Con su resurrección nos da acceso a la vida eterna y ascendido a la diestra del Padre, aguarda el día en que se llevará consigo a Su iglesia y volverá a este mundo, no ya como siervo a morir por nosotros, sino en toda Su gloria como Rey de reyes y Señor de señores, rigiendo sobre todas las naciones contra toda maldad, haciendo reinar la paz y la justicia sobre toda la tierra. 

ACCIÓN: 

Cuando el desánimo intenta corroerme por dentro ofreciéndome esa falsa sensación de haber perdido el gozo y la paz de Dios que en Cristo me fueron dados, voy a estar recordando la reflexión apuntada en este pasaje, fortaleciéndose mi ser, sabiendo que mi Padre y mi Salvador es Dios sobre todas las cosas, y no hay adversidad que pueda prevalecer contra Él. 

El que sostiene mi vida es el Perfecto Rey Eterno, y mi alma lo celebra culminando mi pensamiento con este último verso: 

"El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos."
Apocalipsis 11:15 

Amén.






sábado, 28 de agosto de 2021

EN MANOS DEL SACERDOTE, Deut. 17:8-11


EN MANOS DEL SACERDOTE, Deuteronomio 17:8-11

Cuando alguna cosa te fuere difícil en el juicio, entre una clase de homicidio y otra, entre una clase de derecho legal y otra, y entre una clase de herida y otra, en negocios de litigio en tus ciudades; entonces te levantarás y recurrirás al lugar que Jehová tu Dios escogiere; y vendrás a los sacerdotes levitas, y al juez que hubiere en aquellos días, y preguntarás; y ellos te enseñarán la sentencia del juicio. Y harás según la sentencia que te indiquen los del lugar que Jehová escogiere, y cuidarás de hacer según todo lo que te manifiesten. Según la ley que te enseñen, y según el juicio que te digan, harás; no te apartarás ni a diestra ni a siniestra de la sentencia que te declaren.
Deuteronomio 17:8-11

REFLEXIÓN:

Porque no somos autómatas, sino que Dios nos ha hecho a cada uno con sus singularidades, carácter, personalidad y disposición... A alguno de los jueces de Israel se le podía complicar tomar un veredicto ante algún caso expuesto delante de él.

En este caso, susodicho es guiado a llevar directamente la situación al conocimiento de la autoridad sita en la ciudad escogida por Dios, de entre todas ellas. Entendiendo que Dios los capacita para que toda decisión complicada pueda ser resuelta a través de ellos, según Su voluntad.

Una vez dictada la sentencia, el que ha ido a consultar tiene el deber de ser escrupulosamente fiel a las indicaciones recibidas. Tan grave será no acatar rectamente lo ordenado, que en los próximos versos se indica lo siguiente:

"Y el hombre que procediere con soberbia, no obedeciendo al sacerdote que está para ministrar allí delante de Jehová tu Dios, o al juez, el tal morirá; y quitarás el mal de en medio de Israel. Y todo el pueblo oirá, y temerá, y no se ensoberbecerá."
Deuteronomio 17:12-13

De esta manera se asegura que la ley del pueblo permanezca fundamentada en los mandamientos de Dios dentro de la nación y se mantenga uniforme entre todas las ciudades, según su identidad nacional.

APLICACIÓN:

La iglesia está fundamentada en Cristo, por los apóstoles que Él escogió de entre sus discípulos, además de Pablo, el tardío que fué reclutado camino a Damasco.

En ellos se delegó toda autoridad en Cristo, por el Espíritu Santo para fijar la base sólida sobre la Roca Fundamental, en donde la iglesia se fuera edificando con seguridad, de forma estable y homogénea.

Por lo que desde entonces, durante la actualidad y hasta que vuelva el Señor, las bases apostólicas se mantienen plasmadas en la Palabra de Dios, para que nadie pueda sobreedificar por su cuenta sobre otros pilares que no estén sustentados en Cristo.

Y así lo explica Pablo en su primera carta a los Corintios:

"Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica. Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará. Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego."
1 Corintios 3:10-15

Aunque igual que la iglesia tiene el deber de fundamentarse en la instrucción de Cristo por los apóstoles, también en lo personal debemos acudir a Dios cada vez que se nos presenta una situación no cotidiana, para que nos ayude a resolverla. Y para cuando algo nos inquieta, tenemos este consejo:

"Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús."
Filipenses 4:6-7

ACCIÓN:

¡Cuántas veces he pretendido solucionar un problema por mi propia cuenta, estropeando aún más el entuerto! ¿Cuántas veces me va a tocar humillarme a los pies de Cristo, después de ésto, para poner el caso en Sus manos y dejar que sea Dios quien dirija mi vida?

Y una palabra de aliento y ánimo, para continuar firme en la fe:

"Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga."
Mateo 11:29-30








viernes, 27 de agosto de 2021

LEY Y ORDEN, Deut. 16:18-20


LEY Y ORDEN. Deuteronomio 16:18-20

Jueces y oficiales pondrás en todas tus ciudades que Jehová tu Dios te dará en tus tribus, los cuales juzgarán al pueblo con justo juicio. No tuerzas el derecho; no hagas acepción de personas, ni tomes soborno; porque el soborno ciega los ojos de los sabios, y pervierte las palabras de los justos. La justicia, la justicia seguirás, para que vivas y heredes la tierra que Jehová tu Dios te da.
Deuteronomio 16:18-20

REFLEXIÓN:

(Una sociedad carente de figuras de autoridad es una sociedad  autodestructiva y condenada a desaparecer).

En el pueblo de Dios se va a crear un sistema de ley y orden, para asegurar una sociedad permanente, constructiva y encaminada al objetivo de la promesa de su heredad.

Porque una laxa permisividad provoca perversión en la justicia, como primer mandato sobre este tema, se encuentra el encarecimiento a centrarse en la rectitud de la ley.

Recuerdo la historia de un varón que tuvo doce hijos y convivían todos en familia. El hombre decía amar a todos por igual, pero sus muestras especiales de afecto, trato y detalles hacia uno en concreto eran más que evidentes. Sin darse cuenta este hombre, con su patente preferencia hacia uno de sus hijos, generó celos y envidias entre los demás hermanos. Tanto así, que planeaban matarlo. Gracias a Dios, no materializaron ese deseo, pero acabaron vendiéndolo como esclavo. Esta es una clara muestra de las desgracias que se pueden generar entre los hombres cuando se hace acepción de personas.

Asimismo la práctica del soborno incita  cualquier acto delictivo, "ciega el ojo de los sabios", por cuanto a causa del soborno hacen la vista gorda, pasando por alto lo que no debieran y "pervierte la palabra de los justos", por cuanto seduce al sobornado a dar falso testimonio o a torcer la realidad de los hechos.

Por eso Dios les manda a través de Moisés, que sigan la justicia, si es que quieren vivir de verdad y heredar la tierra de la promesa.

APLICACIÓN:

El mejor ejemplo de justicia y su mayor acto consumado delante de Dios, lo encontramos en la obra redentora de Jesús en la cruz del calvario. Quien siendo Dios, se hizo hombre y se identificó con el pecado del pueblo, dejándose bautizar por Juan el bautista, en la acción de asumir el pecado de ellos, y no solo de los judíos, sino de los de todo el mundo, para clavarlos en la cruz y, recibiendo toda la ira de Dios sobre sí mismo, nos ha dado la justificación en Él delante del Padre, mediante la fe y el arrepentimiento, aceptándolo como Señor y Salvador en nuestra vida.

Así que hallamos la justicia de Dios inquebrantable que sostiene lo siguiente:

"Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro."
Romanos 6:23

Siendo que delante de Dios sólo hay una sentencia y una absolución, la primera es la muerte a causa del pecado y la segunda es la vida eterna en Cristo Jesús a causa de su obra redentora en la cruz del Calvario.

Nos conviene pues, seguir la justicia en Cristo.

ACCIÓN:

Y meditando en cómo el Señor nos lleva a seguir Su justicia, y habiendo hallado justificación en Cristo delante de Dios, reconozco que me veo en confrontación con la Palabra, por cuanto no solamente he pretendido ir de justiciera en el mundo y entre los hermanos, sino hasta he tratado usar la posición de juez, como si tuviera la clarividencia de lo que hay en el corazón de los hombres, juzgando, "este sí, este no", en cuanto a la conversión de los hermanos.

Si esto también te ha ocurrido, pensar en un hermano de manera juiciosa en cuanto a su conversión y su praxis en la fe, en lugar de buscar su restauración en el amor de Cristo, te animo a orar juntamente conmigo pidiendo perdón por esta causa.

Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, te doy gracias por Tu perfecta palabra que me confronta para corrección y me enseña a andar cada vez más a la par de Cristo. Con mi corazón avergonzado y arrepentido te pido perdón por mi desfachatez al pretender ser lo que solamente eres Tú, Juez Justo y Verdadero, y el Único ejecutor de toda justicia. Asimismo te pido de la sabiduría necesaria para comprender mejor Tu palabra y aplicarla a mi vida, según Tu voluntad, y conforme al carácter de Cristo. En el nombre de Jesús, Tu precioso Hijo y mi Señor y Salvador, te lo pido, y a Ti sea toda la gloria y la honra, por los siglos. Amén. 









jueves, 26 de agosto de 2021

TRES VECES, Deut. 16:16-17.


TRES VECES, Deuteronomio 16:16-17.

Tres veces cada año aparecerá todo varón tuyo delante de Jehová tu Dios en el lugar que él escogiere: en la fiesta solemne de los panes sin levadura, y en la fiesta solemne de las semanas, y en la fiesta solemne de los tabernáculos. Y ninguno se presentará delante de Jehová con las manos vacías; cada uno con la ofrenda de su mano, conforme a la bendición que Jehová tu Dios te hubiere dado.
Deuteronomio 16:16-17

REFLEXIÓN:

Después de  Bet-El, que significa  "casa de Dios", punto desde donde Abraham adoró a Dios y le ofrecía los sacrificios, con Josué se estableció Silo, que es "reposo" o "lugar de descanso", como el lugar para la santa convocación en las fiestas solemnes a Jehová.

Al tiempo el arca del pacto fue sacada de Silo por mano enemiga y cuando fue recuperada ya no volvió más a este lugar.

Jerusalén, cuyo nombre significa "ciudad de la Paz", acabó siendo el punto escogido para levantar el Templo, que aunque en la actualidad no lo hay en el sentido físico y material, Dios estableció su reinado perpetuo desde Sion, y hasta allá tendrán que presentarse de todas las naciones, por tres veces año en año, a presentar sus ofrendas de adoración y sacrificio en cada santa convocatoria.

Tres fiestas solemnes marcó Dios en las que los hombres devían presentarse al Templo en santa convocación, siempre con las manos llenas, más o menos, según la cantidad de los bienes de su tierra.

APLICACIÓN:

Tres tratos importantes tiene Dios para con Su pueblo. Primeramente la promesa, luego el rescate y también habría dado el cumplimiento. Mas los representantes de la nación rechazaron al Mesías, quien les hubiera establecido el reino en la tierra que prometió a Abraham como heredad.

Asimismo para el gentil hay redención y santificación en Cristo, quedando a la espera de la glorificación, cuando el Señor venga a por Su iglesia y seamos recibidos por Él en Su gloria, con un cuerpo incorruptible.

Desde antes de la fundación del mundo, Dios estableció que trataría con Su creación por medio de un sólo hombre, quien reinaría por Él sobre la tierra.

El primer hombre, el cual era Adán, cayó en pecado, por lo que fue irremediablemente destituído de la presencia de Dios y, en consecuencia, perdió también el principado del mundo, que le fue arrebatado por Satanás en el mismo momento de su caída.

Pero Dios trazó un plan, que nada ni nadie lo puede frustrar, el cual a través del Hijo del Hombre se vuelva a restaurar esta relación rota de la criatura humana para con su Creador.

Para ello Dios volvería a tratar con un solo hombre, este fue Abraham, para de ahí tratar con un pueblo, Israel, de donde nació el Mesías.  Para, a través de Él, tratar con todas las naciones de la tierra.

Así que ahora, de toda tribu y de toda nación, tenemos la oportunidad de acceder a la vida eterna, mediante la fe en Cristo Jesús, por la consumación de Su obra redentora en la cruz del Calvario, su resurrección al tercer día y su ascensión a la diestra del Padre, donde aguarda el día en que volverá para regir a las naciones con toda autoridad, haciendo reinar la paz sobre la tierra.

Tenemos, también, tres veces en las que el Señor Jesucristo ha tratato y tratará directamente con la humanidad sobre la tierra:

La primera es cuando Jesús vino para ser inmolado como el Cordero de Dios, aunque antes de eso anduvo anunciando el establecimiento del reino delante de toda Israel, acontecimiento llevado a cabo en lo espiritual, mas no posible aún en lo terrenal por cuanto el pueblo rechazó a su Mesías prometido.

La segunda vez es cuando, una vez resucitado y en su cuerpo glorificado, se presenta y permanece en la tierra entre sus discípulos por cuarenta días, preparándolos como apóstoles para el inminente nacimiento de la iglesia.

Y ahora los miembros de Su iglesia, que conformamos el cuerpo de Cristo, siendo Él nuestra cabeza, aguardamos el momento en que seamos recogidos por Él en las nubes hasta Su santa y gloriosa presencia, mientras se dá Su segunda venida, como el Rey de reyes y Señor de Señores sobre la tierra. Y vendrá a establecer Su reino, dando un milenio más de oportunidad a las naciones para que se arrepientan, mientras mantiene a Satanás atado, y  finalmente lo destruirá a él juntamente con toda la maldad.

ACCIÓN:

Leyendo y pensando, cualquier momento es bueno en que el Señor venga a por Su iglesia y empiece a tratar de nuevo con el resto de la humanidad, dando también el cumplimiento de la promesa de Su reino sobre la tierra y Su perpetuo trono sobre toda la creación.

La pregunta que me hago hoy a modo introspectivo es cómo se encuentra mi estado anímico, con respecto a este tan real destino que me depara por promesa del Padre, en el SeñorJesucristo.

Y como no sería la primera vez y aunque deseara que fuera la última, puede que me suceda de nuevo más adelante, y con el pensamiento puesto en los hermanos que están sufriendo persecución directa y amenazas diarias de los que buscan que abandonen su fe, mis oraciones dedicadas hacia todos ellos, y también esta Palabra de aliento:

"No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. Porque aún un poquito, Y el que ha de venir vendrá, y no tardará. Mas el justo vivirá por fe; Y si retrocediere, no agradará a mi alma. Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma."
Hebreos 10:35-39

Amén. 






miércoles, 25 de agosto de 2021

MORADAS, Deut. 16:13-15.


MORADAS, Deuteronomio 16:13-15.

La fiesta solemne de los tabernáculos harás por siete días, cuando hayas hecho la cosecha de tu era y de tu lagar. Y te alegrarás en tus fiestas solemnes, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, y el levita, el extranjero, el huérfano y la viuda que viven en tus poblaciones. Siete días celebrarás fiesta solemne a Jehová tu Dios en el lugar que Jehová escogiere; porque te habrá bendecido Jehová tu Dios en todos tus frutos, y en toda la obra de tus manos, y estarás verdaderamente alegre.
Deuteronomio 16:13-15

REFLEXIÓN:

(Un oasis en el desierto es el deseo de todo aquel transeúnte entre la arena.)

Dios habitó en medio de su pueblo en el desierto. Su Tabernáculo dispuesto en el centro y alrededor, el pueblo, ordenado por tribus, de manera que todos se encontraran a la misma distancia, en igualdad ante cualquier convocación.

Tabernáculo significa literalmente "tienda de campaña", por cuanto ellos estaban acampados en estas moradas de "quita y pon", en el desierto, la santa convocación a esta fiesta solemne será en conmemoración a este hecho.

Es la segunda fiesta de peregrinaje obligatorio a la ciudad escogida por Dios, donde se ubica el Templo, y deberán habitar en tabernáculos durante siete días, haciendo todo lo concerniente a la nómada vida que llevaron en el desierto, una vez salidos de Egipto.

"En tabernáculos habitaréis siete días; todo natural de Israel habitará en tabernáculos, para que sepan vuestros descendientes que en tabernáculos hice yo habitar a los hijos de Israel cuando los saqué de la tierra de Egipto. Yo Jehová vuestro Dios."
Levítico 23:42-43

APLICACIÓN:

Cuando nació Jesús, siendo Dios adquirió naturaleza de hombre, materializando en carne y hueso el Tabernáculo entre Su pueblo.

Pero no fue hasta cincuenta días después de su ascensión a la diestra del Padre, una vez culminada su obra redentora en la cruz con su muerte y su resurreción al tercer día, que los hombres pudimos experimentar y representar la realidad espiritual del significado de la fiesta de los tabernáculos.

"Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu."
Efesios 2:19-22

Pero no solamente hemos sido hechos morada del Espiritu Santo mientras estamos en esta tierra, en nuestro cuerpo de carne y hueso como envase, sino que tenemos aún la esperanza del cumplimiento celestial y eterno del sentido de esta solemne festividad.

"Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos."
2 Corintios 5:1

Y estas son las palabras del Señor en su promesa eterna:

"En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis."
Juan 14:2-3

Y este es el mayor privilegio que podemos tener: que estando corrompidos de nacimiento a causa de Adán, e inevitablemente encaminados hacia la muerte, Dios gustó de esa muerte por nosotros enviando a Su Hijo, y con su resurrección nos dió acceso libre a la vida eterna en Él, sellados con el Espíritu Santo de la promesa, haciendo de nuestra nueva vida en la tierra Su morada permanente.

ACCIÓN:

La lectura y la reflexión de hoy me lleva sí o sí, a examinar mi caminar diario. Por cuanto el Santo Espíritu de Dios mora en mí, mi actitud y testimonio ha de ser fiel a esta realidad.

Y me pregunto si estoy atendiendo a la voluntad de Dios o si estoy dando oportunidad a la mía propia, conforme a mis pasos en este mundo.

Acompaño como último apunte, estas palabras de Pablo:

"Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis."

"Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu."
Gálatas 5:16-17 y 24-25.





martes, 24 de agosto de 2021

LO PRIMERO, Deut. 16:9-12


LO PRIMERO, Deuteronomio 16:9-12. 

Siete semanas contarás; desde que comenzare a meterse la hoz en las mieses comenzarás a contar las siete semanas. Y harás la fiesta solemne de las semanas a Jehová tu Dios; de la abundancia voluntaria de tu mano será lo que dieres, según Jehová tu Dios te hubiere bendecido. Y te alegrarás delante de Jehová tu Dios, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, el levita que habitare en tus ciudades, y el extranjero, el huérfano y la viuda que estuvieren en medio de ti, en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido para poner allí su nombre. Y acuérdate de que fuiste siervo en Egipto; por tanto, guardarás y cumplirás estos estatutos.
Deuteronomio 16:9-12 

REFLEXIÓN: 

(Las Semanas, las Primicias, la Cosecha, los Juramentos, la entrega de la Ley, la Conclusión o el Pentecostés... Siete nombres para una misma fiesta, aunque la más fiel a su propósito es la de las Primicias.) 

El día en que se entregan las primicias en el templo es de santa convocación, día en que nada se ha de hacer. 

Es una de las tres fiestas de obligado peregrinaje al Templo, de manera que sin este no se puede llevar a cabo. 

Las primicias toman un valor muy importante a ojos de Dios. Primeramente porque ofreciéndoselas a Él estaban demostrando tener a Dios en primer lugar, amarlo por sobre todas las cosas, además de ser el reconocimiento de Dios como el Proveedor de todas las cosas. En Egipto la décima plaga que mandó sobre ellos fué especialmente hiriente contra las primicias de Egipto, empezando por los primogénitos de los hombres, dándoles muerte. 

Por lo que esta fiesta solemne hace hincapié en la consagración de las primeras cosas en gratitud a Dios y por derecho propio como el Proveedor de todas las cosas. 

Aún así, Dios no obliga a ofrendar una cantidad mínima imprescindible, sino que apela al corazón generoso del pueblo, por lo que el énfasis se encuentra en la importancia del cumplimiento de la fiesta, según la ordena. 

APLICACIÓN: 

Aunque se sigue ofrendando el primer grano, en la actualidad, el judío no puede llevar a cabo la fiesta de las Primicias, por cuanto el Templo de Jerusalén fue destruído, el cual es requisito imprescindible acudir a este. 

Hoy día la festividad toma el significado que cada uno enfatiza, según el nombre con el que la identifica: Si es Primicias, de lo primero ofrendarán en gratitud; si es Semanas, serán más escrupulosos con el proceder durante el transcurso del tiempo de ellas; cuando celebran la Ley, agradecen el día en que les fue dada por Dios en el Sinaí, asi como la celebración de los  dos Juramentos; y cuando es llamada Conclusión o Pentecostés, se celebra el fin de lo que se entiende como continuidad de lo que inició en la Pascua. 

Todo esto dentro del marco judío. Ya que para la iglesia las Primicias reciben un significado más excelso, por cuanto lo es Cristo. 

"Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos. Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida."
1 Corintios 15:21-23 

ACCIÓN: 

Doy gracias a Dios por santificarnos en Cristo, siendo Él la primicia de nuestra santidad y de toda Su heredad de la cual nos hace partícipes juntamente con Él, por haber creído en Su obra redentora en la cruz del Calvario y en Su resurrección, la que nos permite ser vivificados en Él, conforme Cristo fue el primero en ascender a la diestra del Padre. 

Hoy es día de celebrar las primicias en Cristo, y no porque el calendario señale de hoy un día singular, sino que hoy, mañana y todos los días, desde que reconocimos a Jesús como Señor y Salvador, fuimos hechos nuevos en Él, recibiendo en Cristo toda provisión necesaria y plenitud de vida. 

Cierro mi celebración con el siguiente versículo: 

"Si las primicias son santas, también lo es la masa restante; y si la raíz es santa, también lo son las ramas."
Romanos 11:16







lunes, 23 de agosto de 2021

DESPOJADOS DE LEVADURA, Deut. 16:8


DESPOJADOS DE LEVADURA, Deuteronomio 16:8

Seis días comerás pan sin levadura, y el séptimo día será fiesta solemne a Jehová tu Dios; no trabajarás en él.
Deuteronomio 16:8

REFLEXIÓN:

(Un pan esponjoso es agradable al paladar y más saciante que una torta sin miga. Uno puede sentirse satisfecho tan pronto lo ha comido, pero durante el transcurso del día va a necesitar de nuevo saciar su hambre...)

Las levaduras descomponen el alimento durante el proceso de fermentación, aminorando su valor calórico y provocando que se eche a perder mucho antes de lo previsto.

Con los panes sin levadura, el pueblo consiguió llevar más provisión de alimento, al prepararse más rápidamente que el pan leudado, y le aguantó por más tiempo. Asimismo no debieron sentir pesadez digestiva y su energía se mantendría por más horas, durante su salida de la opresión Egipcia.

Ahora Dios les manda deshacerse de toda levadura durante al menos, los siete días en que establece esta fiesta solemne, en conmemoración a su apresurada salida de Egipto.

"No comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción, porque aprisa saliste de tierra de Egipto; para que todos los días de tu vida te acuerdes del día en que saliste de la tierra de Egipto."
Deuteronomio 16:3

APLICACIÓN:

Igual que el pueblo de Dios fue mandado a despojarse de la levadura en su pan, a su salida de Egipto y por fiesta solemne conmemorativa, el Señor menciona este mismo consejo a sus discípulos, dándole un  sentido de índole espiritual.

"Y Jesús les dijo: Mirad, guardaos de la levadura de los fariseos y de los saduceos."
Mateo 16:6

En un principio, los discípulos pensaban que Jesús se refería al sentido literal, lo que vendría a ser aconsejar el pan sin levadura, en vista de que ninguno se acordó de traer pan para la jornada evangelística.

Es ahí cuando el Señor les tuvo que dar la correcta interpretación, visto el mal entendido:

"¿Cómo es que no entendéis que no fue por el pan que os dije que os guardaseis de la levadura de los fariseos y de los saduceos? Entonces entendieron que no les había dicho que se guardasen de la levadura del pan, sino de la doctrina de los fariseos y de los saduceos."
Mateo 16:11-12

También, en lo relatado en el Evangelio según Lucas, deja plasmada claramente la intención de esta orden:

"En esto, juntándose por millares la multitud, tanto que unos a otros se atropellaban, comenzó a decir a sus discípulos, primeramente: Guardaos de la levadura de los fariseos, que es la hipocresía. Porque nada hay encubierto, que no haya de descubrirse; ni oculto, que no haya de saberse. Por tanto, todo lo que habéis dicho en tinieblas, a la luz se oirá; y lo que habéis hablado al oído en los aposentos, se proclamará en las azoteas."
Lucas 12:1-3

Y esta misma hipocresía religiosa fue denunciada por Pablo a la iglesia en Corinto, cuando se enteró de que en la congregación se estaba permitiendo a uno de ellos, vivir en un pecado tan grave como es la fornicación, diciendo:

"No es buena vuestra jactancia. ¿No sabéis que un poco de levadura leuda toda la masa? Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros. Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad."
1 Corintios 5:6-8

"Un poco de levadura leuda toda la masa", vino a expresar el cuan grave daño puede hacer a toda la congregación que uno de sus miembros ande practicando el pecado libremente en medio de ella, pudiendo llegar a aceptarse la práctica del libertinaje como algo común.

Así que más que un consejo, era un  imperativo a que se despojaran de esta levadura en sus panes. En alusión a la pascua, para hacerles recordar a Cristo como el perfecto Cordero, que los limpió por completo de todo pecado, en su pasada forma de vivir. Y de ese modo no volvieran a contaminar la harina, con este leudante de transgresiones, dignas del viejo hombre.

ACCIÓN:

Del mismo modo en que Israel debía despojarse de las levaduras de Egipto, los discípulos debían guardarse de las de los fariseos y saduceos, y la iglesia debe de rechazar toda práctica pecaminosa dentro de la congregación... En lo personal, me toca la responsabilidad de hacer lo propio.

Y es cuando la reflexión me lleva a examinar mi vida de fe en Cristo de modo que, en un ejercicio serio de introspección, descubra lo que aún hay encubierto en cuanto a la actitud propia del viejo hombre y no según mi nueva vida en Cristo.

Y hallo que Pablo también nos dejó instrucciones en este sentido, diciendo:

"En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad."
Efesios 4:22-24

Para vergüenza mía y tras mi ejercicio de autoconfrontación, debo reconocer que consigo una lista más larga de la que esperaba, pensándome estar llevando mi vida de santidad más al día... Toca orar, pedir perdón y desechar todo lo malo.

Y si usted que lee no ha hallado todavía nada de qué arrepentirse. Recuerde este Salmo en la oración de su noche, antes de acostarse:

¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos.
Salmos 19:12


domingo, 22 de agosto de 2021

PASAR POR ALTO, Deut. 16:1-7


PASAR POR ALTO, Deuteronomio 16:1-7.

Guardarás el mes de Abib, y harás pascua a Jehová tu Dios; porque en el mes de Abib te sacó Jehová tu Dios de Egipto, de noche. Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar que Jehová escogiere para que habite allí su nombre. No comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción, porque aprisa saliste de tierra de Egipto; para que todos los días de tu vida te acuerdes del día en que saliste de la tierra de Egipto. Y no se verá levadura contigo en todo tu territorio por siete días; y de la carne que matares en la tarde del primer día, no quedará hasta la mañana. No podrás sacrificar la pascua en cualquiera de las ciudades que Jehová tu Dios te da; sino en el lugar que Jehová tu Dios escogiere para que habite allí su nombre, sacrificarás la pascua por la tarde a la puesta del sol, a la hora que saliste de Egipto. Y la asarás y comerás en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido; y por la mañana regresarás y volverás a tu habitación.
Deuteronomio 16:1-7

REFLEXIÓN:

El mes de Abib, ( en Hebreo, "espiga"), que fue conocido luego como mes de Nisán (del Acadio "comienzo" y del sumerio "retoño" o "primer brote"), después de la deportación a Babilonia, es el primer mes en el calendario Hebreo, desde que salieron de Egipto.

En el día 14 de este mes durante la esclavitud del pueblo en Egipto, Dios les mandó sacrificar a un cordero, la sangre del cual debía de bañar los dinteles de la puerta de entrada a sus casas y mientras el animal, quemado en fuego, era comido por completo en el interior de la vivienda, Jehová los libraría de la plaga en que daba muerte a todo primogénito, de hombre y de animal, habido en Egipto.

Esta sería la primera vez que celebrarían la Pascua, que en Hebreo se dice "Pesaj" y significa "pasar por alto". A partir de ese día, Dios manda que la Pascua sea celebrada entre el pueblo judío cada año en la misma fecha, como estatuto perpetuo, en calidad de fiesta solemne.

(La solemnidad se diluyó en el corazón del hombre).

En la actualidad la nación Hebrea obvia su pasado de esclavitud, su rescate por mano poderosa de Dios y el significado real de la Pascua del Señor.

Para empezar, su calendario pasó de iniciarse en el mes Nisán a iniciarse en su séptimo mes, que es el de Tishrei (que significa "comienzo"), en memoria de la Creación de Dios.

Asimismo la celebración de la Pascua ha adquirido otro significado para la población moderna, siendo que le añadieron y quitaron elementos, de manera que en vez de recordar meramente el ser librados de la muerte a través de la sangre del cordero en Egipto, ahora el protagonismo no lo llevaría el animal inmolado, sino una representación de varios elementos en un plato llamado Séder de Pesaj, (que significa "orden" o "colocación"), colocados en riguroso orden, de forma tradicional y cargada de simbolismo, para nada fieles a la ordenanza de Dios sobre el protocolo de esta festividad. En la que del cordero sólo presentan una tibia (que ni la tocan, ni la comen, sino para recordar que tras la destrucción del Templo en el año 70 d.C., ya no pueden ofrecer sacrificios según mandato Divino). También añaden entre otros elementos, un huevo cocido en señal de duelo por la destrucción del Templo.

APLICACIÓN:

(Dios es Omnisciente y Justo, por lo que jamás mandaría a Su pueblo celebrar una fiesta solemne, como estatuto perpetuo, sabiendo que llegaría un día en que no pudieran ejecutarla, según las instrucciones, por falta de alguno de sus  elementos.)

Y si los ojos y el corazón de los representantes de Israel, en tiempo en que Dios habitó entre los hombres y comió con ellos, hubieran reconocido públicamente al Mesías en lugar de mandarlo a matar. Habrían reconocido en Cristo el cumplimiento de la Ley, y aún el plan de redención se seguiría dando para el resto de la humanidad, (pues los planes de Dios son decretos inamovibles). Desde luego, el Reino terrenal de Dios se habría establecido ya sobre la tierra hace un par de milenios. No les haría falta acatar un mandato perpetuo que les es imposible de cumplir por sus propios medios, ya que el elemento principal para su cumplimiento, que es el Templo, fue destruído cerca de 4 décadas después de la consumación del sacrificio redentor en la cruz del Calvario.

Mientras tanto, los que hemos creído en el Señor Jesucristo, sabemos que Él vino a ser el perfecto Cordero Pascual. Quien  entregándose a Sí mismo en pago por nuestros pecados, nos ha pasado por alto en la sentencia de la muerte que pesaba sobre nosotros, los que también hemos pasado a ser el templo de ejecución del perfecto sacrificio, y la celebración perpetua de la memoria de redención en Cristo.

A pesar del contratiempo judío tras la destrucción del Templo, presumen estar cumpliendo con la Ley, en celebración de una presunta Pascua en la que reservan una silla de más vacía y una copa de plata a la espera del profeta Elías.

Y acerca de la ley y de quien busca su justificación por ella, Pablo dice lo siguiente:

"Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas; la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados, con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús."
Romanos 3:21-26

ACCIÓN:

La Pascua de los judíos ha pasado a ser nuestra partición del pan y del vino, el símbolo introspectivo y permanente, en memoria de los pecados que nos han sido pasados por alto por medio del perfecto sacrificio de Cristo Jesús, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.

Es cuando yo hago memoria de ésto: "Tomad y comed, este es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí." Las palabras del Señor Jesucristo, su cuerpo, nuestro pan de vida, y su sangre, la copa del nuevo pacto para con nosotros: La redención y la vida.

Hoy es día de hacer memoria de dónde fuimos rescatados cuando el Señor tendió su mano y la dejó clavar en la cruz sin ofrecer resistencia. Una vida derramada por nuestros pecados y en memoria de todos a los que Dios pasó por alto sus transgresiones en los tiempos del Antiguo Pacto, mediante la fe en que algún dia vendría el perfecto Cordero Pascual, el Hijo anunciado por los profetas y la simiente de la mujer prometida por Dios desde la caída de Adán.

Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, gracias, un día más, por Tu perfecta palabra que me confronta recordándome Tu inconmensurable amor para conmigo, no habiéndote importado tamaña, mi maldad, sino que me has amado desde antes de la fundación del mundo, trazando el perfecto plan de salvación y de vida eterna, en rescate por mí y por todos los hombres. Perdóname por mis jactancias al tratar de obviar muchas veces aquellas miserias de las que me rescataste por medio de Tu Hijo, cuando estaba a punto de perecer hundida en el cieno del pecado. Pasándolo por alto, me tendiste la mano, me sacaste y me insuflaste vida. Me hiciste nueva criatura en Cristo, sea mi vida un fiel testimonio de su amor y sea Tu Santo Espíritu el que gobierne mi caminar diario en Tu santa y perfecta voluntad. En el nombre de Jesús, Tu precioso Hijo, el Perfecto Cordero Pascual y Señor y Salvador mío. Amén.







sábado, 21 de agosto de 2021

EL PRIMOGÉNITO SIN TACHA, Deut. 15:19-21


EL PRIMOGÉNITO SIN TACHA, Deuteronomio 15:19-21

Consagrarás a Jehová tu Dios todo primogénito macho de tus vacas y de tus ovejas; no te servirás del primogénito de tus vacas, ni trasquilarás el primogénito de tus ovejas. Delante de Jehová tu Dios los comerás cada año, tú y tu familia, en el lugar que Jehová escogiere. Y si hubiere en él defecto, si fuere ciego, o cojo, o hubiere en él cualquier falta, no lo sacrificarás a Jehová tu Dios.
Deuteronomio 15:19-21

REFLEXIÓN:

Dios manda consagrar para sí a todo primogénito macho de vacuno y bovino.

El animal tiene que ser sin tacha, sin defecto alguno, de lo contrario, no es apto para ser consagrado como sacrificio a Dios.

Así pues, el primogénito sin tacha es dado en sacrificio y seguidamente ha de ser comido en el lugar que Dios ha determinado. Y este mandamiento debía de hacerse cada año.

APLICACIÓN:

Gracias a Dios, hemos sido provistos de Su Unigénito para darlo en sacrificio en  pago por nuestros pecados.

Pues Jesús de Nazaret siendo Dios, fue sacrificado como hombre, perfecto, sin mancha, sin pecado. Pero hecho por nosotros maldición. Por tal de que  pudiéramos ser justificados delante del Padre a través de Cristo.

Unigénito, como único e inigualable, Dios Hijo, el Señor Jesucristo que tras la consumación de su obra redentora en la cruz del Calvario y en su resurrección al tercer día, pasó a ser el Primogénito de entre todos los que vamos a ser resucitados juntamente con él, estos somos los redimidos, los que hemos creído en Jesús y lo aceptamos como Señor y Salvador de nuestra vida, que ha pasado a ser una en Cristo.

Pablo así describe a nuestro Señor Jesucristo en la presentación de su carta a los creyentes en Colosas:

"Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten; y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia; por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz. Y a vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él;"
Colosenses 1:16-22

Ahora todos los redimidos hemos pasado de muerte a vida y santificados, esto es, apartados para Dios en Cristo, quien es nuestro emplazamiento permanente y nuestro alimento espiritual diario que nos provee de un cada vez más acentuado carácter de Cristo en cada uno de nosotros. Por cuanto de Él adquirimos el sustento para el crecimiento, a través de Su palabra, todos en unidad, como cuerpo de Cristo al que el viene a ser la cabeza.

Y estas son las palabras del Señor Jesús sobre Sí mismo en cuanto a nuestro alimento espiritual:

"De cierto, de cierto os digo: El que cree en mí, tiene vida eterna. Yo soy el pan de vida. Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y murieron. Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él come, no muera. Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo. (...)  Este es el pan que descendió del cielo; no como vuestros padres comieron el maná, y murieron; el que come de este pan, vivirá eternamente."
Juan 6:47-51 y 58

Con estas palabras el Señor les dice que su vida va a ser entregada para redimir a la humanidad de la muerte, aludiendo al pan que desciende del cielo, como el maná, un alimento que sólo Dios puede proveer, el cual es el verdadero, que aprovecha en lo espiritual, para vida eterna.

Gracias a Dios, por medio del Señor Jesucristo, hemos sido librados de la muerte y de tener que presentarnos delante de Él con un sacrificio animal cada año, tal y como le fue ordenado a Su pueblo en la ley de Moisés.

Porque la ley de Moisés nos conduce a Cristo, el perfecto sacrificio, por quien accedemos al perdón y a la vida eterna.

Ahora, si mas bien la vida es dada en exclusiva por el Hijo, el crecimiento en el conocimiento y la madurez en el Espíritu va a depender de la disposición de cada creyente en alimentarse de Su palabra, la cual Dios ha puesto a nuestro abasto de toda la humanidad con la Biblia.

La Palabra de Dios va transformando nuestro ser conforme más nos alimentamos de ella, conformándonos a la imagen de Cristo. Esto no significa tan sólo leerla o analizarla de forma literaria, sino meditarla y ponerla por obra.

ACCIÓN:

En confrontación con la Palabra he de disponerme a examinar cómo estoy nutriendo mi espíritu, si con la Santa Palabra de Dios, en sometimiento a Cristo o por medio de otras fuentes, que no aprovechan a mi crecimiento espiritual en sabiduría de Dios, sino de hombres.

Y hallo la necesidad de enriquecer mi vida devocional. Lo haré iniciando un plan de lectura no muy ambicioso de la Palabra de Dios, que me permita la reflexión de pequeños pasajes diarios, de los cuales, siguiendo el orden de lectura en oración y sin obviar su contexto, pueda ir extrayendo la enseñanza y la aplicación práctica a mi caminar en Cristo. 

Y concluyendo esta reflexión, acompaño el siguiente pasaje:

"Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido. Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño; pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal."
Hebreos 5:12-14







viernes, 20 de agosto de 2021

A MANOS LLENAS, Deut. 15:7-11


A MANOS LLENAS, Deuteronomio 15:7-11.

Cuando haya en medio de ti menesteroso de alguno de tus hermanos en alguna de tus ciudades, en la tierra que Jehová tu Dios te da, no endurecerás tu corazón, ni cerrarás tu mano contra tu hermano pobre, sino abrirás a él tu mano liberalmente, y en efecto le prestarás lo que necesite. Guárdate de tener en tu corazón pensamiento perverso, diciendo: Cerca está el año séptimo, el de la remisión, y mires con malos ojos a tu hermano menesteroso para no darle; porque él podrá clamar contra ti a Jehová, y se te contará por pecado. Sin falta le darás, y no serás de mezquino corazón cuando le des; porque por ello te bendecirá Jehová tu Dios en todos tus hechos, y en todo lo que emprendas. Porque no faltarán menesterosos en medio de la tierra; por eso yo te mando, diciendo: Abrirás tu mano a tu hermano, al pobre y al menesteroso en tu tierra.
Deuteronomio 15:7-11

REFLEXIÓN:

La cooperación por mandato, les advierte contra la mezquindad del que mira por encima del hombro al que no tiene y no le ayuda en sospecha de que no le sea devuelto lo prestado.

La advertencia en sí es contra el de corazón perverso, que priva al que va apurado en sus necesidades básicas, teniendo con qué ayudarle.

Se sugiere a la acción del avaro, aquel que cierra sus ojos cuando pasa por al lado de un indigente, o echa la vista hacia el otro lado, aún pesándole su billetera o cargando la compra del día recién hecha. 

La generosidad se ha de tornar ley porque el hombre pronto es tentado a salvaguardar lo que estima de su propiedad y cada uno mira para sí mismo, endureciendo el corazón contra el prójimo.

Dios incentiva al generoso con la promesa de su bendición, ya que no le importa si está cercano o lejos el año de remisión, sino que se centra en cubrir la necesidad del vecino.

Además no hay excusa, porque siempre hay a quién ayudar.

APLICACIÓN:

Dios está en contra de quienes dan para recibir a cambio y no con corazón sincero.

Él nos ha provisto de todo lo necesario a sus hijos, lo nínimo que nos pide es que en generosidad, ayudemos al necesitado, confiando que nuestro Proveedor es el Soberano y Creador de todas las cosas, y que no desampara a los suyos.

El mayor ejemplo de generosidad lo tenemos en el Señor Jesucristo, quien siendo Dios, habitó entre nosotros viviendo y sufriendo como hombre, para finalmente ser entregado en sacrificio por nuestros pecados. Murió y resucitando al tercer día, luego fue ascendido a los cielos y ahora se encuentra a la diestra del Padre, donde a más de habernos redimido con su sangre, en el "consumado es", y dado paso a la vida eterna con su resurrección de entre los muertos, ahora aguarda el día en que va a volver a nosotros, pero ya no como cordero que va al matadero, sino como Señor de señores y Rey de reyes, para destruir por completo la maldad con toda Su autoridad, mientras tanto, el Señor nos da una muestra de su paciencia, para que todos podamos proceder al arrepentimiento.

Nosotros desde Adán somos los menesterosos, pero Cristo nos ha dado de su propia vida, proporcionándonos hasta Su identidad delante del Padre, como justificación y salvaconducto a la vida eterna en Su presencia.

Solo debemos creer en Él y aceptarlo como Señor y Salvador en nuestras vidas en un sincero arrepentimiento.

¿Cómo no vamos a ser generosos, teniendo tal ejemplo en Cristo?

Asimismo tenemos palabra de exhortación para encaminarnos al carácter del Hijo:

"Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma."

"Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres, enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente, aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras."

(Santiago 2:15-17 y Tito 2:11-14)

Existe un pensamiento religioso que indica que, como salvos por gracia y no por obras, ya no es necesario hacer buenas obras, por lo tanto, no ayudan al necesitado ni se molestan en hacer mostrar la gracia.

Pero para esto esta la gracia de Dios, para que seamos salvos por ella y para que nos presentemos delante de los hombres a manos llenas de obras no muertas, sino llenas de gracia.

Porque al igual que la salvación es un regalo inmerecido por el que ha pagado Cristo, el mismo Dios que nos prepara este don, también nos dispone para buenas obras, no para salvación sino como testimonio de ella en una nueva vida en Cristo.

"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas."
Efesios 2:8-10

ACCIÓN:

Hoy voy a pedir que me acompañes en mi pregunta y te respondas a modo introspectivo.

¿Estoy obrando generosamente, conforme al carácter de Cristo o según mis propios intereses?

A veces caemos en pensar que con cumplir con la práctica de la fe cristiana dentro del ámbito litúrgico eclesial ya estamos cumpliendo con la voluntad de Dios. Debemos desechar este pensamiento lo antes posible y observar lo que dice Santiago:

"La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo."

"Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma."

(Santiago 1:27 y 2:15-17)

Amado Padre Celestial y Dios Todopoderoso, gracias por Tu perfecta Palabra que me va formando cada día más en el carácter de Cristo. En confrontación con la lectura de hoy, te pido perdón por haber cerrado los ojos tantas veces y haber apretado el puño para no soltar de tus bendiciones hacia los menesterosos. Ruego me sea dada la sabiduría necesaria para, además de poder entender tu Palabra, aplicarla poniéndola por obra. No sean mis andares como de tener una fe muerta sino en disposición de presentarme siempre delante de los hombres a manos llenas de Tu gracia. Para Tu gloria y honra, en el nombre de Jesús.
 Amén.




jueves, 19 de agosto de 2021

AÑO DE REMISIÓN, Deut. 15:1-5.


AÑO DE REMISIÓN, Deuteronomio 15:1-5.

Cada siete años harás remisión. Y esta es la manera de la remisión: perdonará a su deudor todo aquel que hizo empréstito de su mano, con el cual obligó a su prójimo; no lo demandará más a su prójimo, o a su hermano, porque es pregonada la remisión de Jehová. Del extranjero demandarás el reintegro; pero lo que tu hermano tuviere tuyo, lo perdonará tu mano, para que así no haya en medio de ti mendigo; porque Jehová te bendecirá con abundancia en la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad para que la tomes en posesión, si escuchares fielmente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y cumplir todos estos mandamientos que yo te ordeno hoy.
Deuteronomio 15:1-5

REFLEXIÓN:

El perdón de las deudas llega por mandato divino a las tribus de Israel cada séptimo año, el año de remisión. Así que toda  deuda es remitida por ley cada siete años, coincidiendo también con el año en que reposan las tierras de su cultivos.

Siendo aplicable solamente al prójimo, no a extranjeros, estos últimos quedan libres de la obligación de perdonar una deuda, pero tampoco se pueden beneficiar de ser perdonados (por cuanto son extranjeros y no aplican la ley a sus vidas).

Como todos los demás mandamientos, este cumple su propósito, el cual está claramente indicado, que es el de impedir la mendicidad entre sus gentes.

Además, el cumplimiento de este mandato trae promesa de bendición de Dios sobre sus tierras. Aunque esta bendición no deja de estar ligada a la condición de que el pueblo se mantenga sujeto en obediencia al resto de la ley.

APLICACIÓN:

Habiendo leído esto podemos pensar: "Sería ideal que existiera esta ley en la sociedad actual donde vivimos". Y lo cierto es que sí que disponemos de una ley irrevocable de remisión.

Esta ley de remisión no abarca solamente un año, sino que desde que Jesús hizo clavar en la cruz, juntamente con Él, todos los pecados de este mundo, a todo aquel que en Él cree le son remitidas todas las deudas, adquiridas contra Dios, a causa del pecado. No hallando solo un año de reposo, sino un descanso permanente en Cristo, desde el momento de la remisión y de modo ilimitado.

"El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él."
Juan 3:36

También encontramos una distinción en la aplicación de esta remisión, la cual solo es aplicable a quien cree en el Señor Jesucristo, y no a los incrédulos.

Y como todo lo que Dios hace tiene un propósito, la finalidad de esta ley reside en hacer desaparecer la esclavitud del pecado en el mundo, conforme se va creyendo y aceptando la justificación por medio de Cristo.

Al igual que para Israel existe una promesa de bendición, entre otras, la que destaca en la ley de Jesucristo, es la del disfrute de la vida eterna juntamente con Él.

"El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios. Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados."
Romanos 8:16-17

Aunque también está sujeta a una condición, ésta se enfoca en un arrepentimiento genuino y en la aceptación de Jesús como Señor y Salvador.

ACCIÓN:

El pasaje de hoy me lleva a recordar la parábola de los dos deudores, dada por el Señor Jesucristo:

"Por lo cual el reino de los cielos es semejante a un rey que quiso hacer cuentas con sus siervos. Y comenzando a hacer cuentas, le fue presentado uno que le debía diez mil talentos. A éste, como no pudo pagar, ordenó su señor venderle, y a su mujer e hijos, y todo lo que tenía, para que se le pagase la deuda. Entonces aquel siervo, postrado, le suplicaba, diciendo: Señor, ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo. El señor de aquel siervo, movido a misericordia, le soltó y le perdonó la deuda. Pero saliendo aquel siervo, halló a uno de sus consiervos, que le debía cien denarios; y asiendo de él, le ahogaba, diciendo: Págame lo que me debes. Entonces su consiervo, postrándose a sus pies, le rogaba diciendo: Ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo. Mas él no quiso, sino fue y le echó en la cárcel, hasta que pagase la deuda. Viendo sus consiervos lo que pasaba, se entristecieron mucho, y fueron y refirieron a su señor todo lo que había pasado. Entonces, llamándole su señor, le dijo: Siervo malvado, toda aquella deuda te perdoné, porque me rogaste. ¿No debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti? Entonces su señor, enojado, le entregó a los verdugos, hasta que pagase todo lo que le debía. Así también mi Padre celestial hará con vosotros si no perdonáis de todo corazón cada uno a su hermano sus ofensas."
Mateo 18:23-35.

Reflexionando en esta escena intento ubicarme en ella a modo confrontación y me hago las siguientes preguntas:

¿Quién soy yo? ¿Me comporto como el de la parábola o soy consciente de la incalculable deuda que Dios me ha perdonado, y obro en consecuencia hacia mis deudores o hacia quienes me ofenden ? ¿Qué ejemplo testimonial estoy dando en este aspecto?

Padre Amado, te pido perdón por el mal ejemplo que doy reclamando a mis deudores, ya sea por dinero o por alguna ofensa, el pago de su deuda. Gracias por mostrarme cada día Tu incomnensurable amor para conmigo, Tu paciencia y el perdón de la deuda que adquirí contigo a causa de mi pecado, la cual jamás hubiera podido pagar de no haberme enviado a Tu Hijo, el Señor Jesucristo, para que mi alma pueda presentarse justificada delante de Tí a través de Él, quien pagó, no sólo por mi deuda, sino por la de toda la humanidad,  en la cruz del calvario. Fortalece mi fe y enséñame a ser un eficaz medio de difusión de Tu Palabra y de Tu anuncio de remisión, para que muchos puedan creer también en Cristo para la salvación de sus almas. Sea también amoldado mi carácter, para que no sean solo palabras, sino que mi diario vivir sea un claro testimonio de Cristo. En el nombre de Jesús, Tu precioso Hijo y mi Señor y Salvador, te lo pido. Amén.






miércoles, 18 de agosto de 2021

UNA BUENA INVERSIÓN, Deut. 14:24-26


UNA BUENA INVERSIÓN, Deuteronomio 14:24-26.

Y si el camino fuere tan largo que no puedas llevarlo, por estar lejos de ti el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido para poner en él su nombre, cuando Jehová tu Dios te bendijere, entonces lo venderás y guardarás el dinero en tu mano, y vendrás al lugar que Jehová tu Dios escogiere; y darás el dinero por todo lo que deseas, por vacas, por ovejas, por vino, por sidra, o por cualquier cosa que tú deseares; y comerás allí delante de Jehová tu Dios, y te alegrarás tú y tu familia.
Deuteronomio 14:24-26

REFLEXIÓN:


Porque Dios no es un dios de penitencias, sino el Creador de todas las cosas, por lo cual no necesita que nadie le dé nada. Él es el que prospera para prosperar, el que ofrece para ofrendar y el que enriquece para invertir. Todo el sistema de los diezmos y las primicias les servirían para recordar y agradecer que no hay mérito en ellos de lo que obtienen, sino que todo proviene de Dios.

Dios ofrece además, una solución muy práctica al que viva lejos del lugar escogido para las ofrendas y sacrificios. A más de fomentar la economía, con una entrada de  capital constante que asegure la sostenibilidad de la nación, empezando por el lugar escogido por Dios, el cual es Jerusalén.

En conocimiento de las bendiciones de Dios a quienes le obedecen, al pueblo sólo le debe bastar con mantenerse agradecido en obediencia para asegurarse una vida larga y próspera en el beneplácito Divino.

APLICACIÓN:

No es voluntad de Dios que el hombre pase hambre. Pues cuando lo creó, y a Su imagen y semejanza lo hizo, Dios lo puso en medio del más maravilloso, fértil, abundante, variopinto, fructífero y fragante huerto jamás visto ni llegado a imaginar, plantado por Dios mismo. El Creador dispuso que la criatura que representaría Su reino sobre la tierra, y este era Adán, estuviera siempre suplido de todo lo bueno.

Y aunque a pesar del pecado de Adán, las tornas se volvieron, comenzando un declive en la humanidad sentenciada a muerte desde su nacimiento y condenada de por vida a esforzarse por disponer de su propio pan, Dios no ha cesado de ofrecer una provisión al hombre y de tenderle la mano.

La mejor provisión que nos ofrece es la vida a través del Hijo, el Señor Jesucristo  quien murió y resucitó para que en Él pudiéramos disponer de justificación delante del Padre.

Esta es la mayor muestra de amor que habrá jamás, que el Hijo, siendo Dios, se despoje de Su gloria para vivir y morir como hombre, (mas sin pecado), en pago por nuestros pecados, para darnos en Él, acceso directo a la vida eterna.

Después de esta gran provisión de amor y de vida, el Señor asegura proveernos de todo lo necesario, diciendo:

"Vosotros, pues, no os preocupéis por lo que habéis de comer, ni por lo que habéis de beber, ni estéis en ansiosa inquietud. Porque todas estas cosas buscan las gentes del mundo; pero vuestro Padre sabe que tenéis necesidad de estas cosas. Mas buscad el reino de Dios, y todas estas cosas os serán añadidas."
Lucas 12:29-31

Y como que toda provisión material y espiritual proviene de Dios, Él espera de sus hijos que vivan en consecuencia de este favor inmerecido, confiadamente, en generosidad e invirtiendo sabiamente todo don recibido, como dijo el Señor a los discípulos: "de gracia recibísteis, dad de gracia", y "no os hagáis tesoros en la tierra sino haceos tesoros en el cielo, porque donde esté vuestro tesoro,allí estará vuestro corazón". (Ambas cosas las leemos en Mateo 6:19-21 y 10:8).

ACCIÓN:

La palabra de hoy me confronta en el sentido en que el Señor me dirige a sacar mayor partido a todo bien material y espiritual recibido por Su parte, invirtiéndolo sabiamente para que produzca la mayor cantidad o calidad de fruto, que pueda ofrecerle el día en que me encuentre en Su presencia, ante el tribunal de Cristo.

Y me surge el preguntarme cómo estoy invirtiendo el tiempo, los bienes y los dones que Dios me ha dado: si los estoy desperdiciando en lo terrenal y perecedero o si están generando intereses en el reino celestial.

Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, gracias te doy por Tu preciosa, santa y perfecta Palabra que me confronta y me enseña a enderezar mis pasos conforme al carácter de Cristo. Con vergüenza te pido perdón por el desperdicio y la mala inversión de los dones que me das, comenzando por el tiempo y continuando por todas las oportunidades desaprovechadas de difundir el evangelio de Cristo. Provéeme, además de todo lo  que ya recibo, de la sabiduría necesaria para invertir sabiamente mi vida en Cristo y todo lo que me es añadido, para que sirva y dé rico y abundante fruto, para Tu gloria y Honra. En el nombre de Tu amado Hijo, mi Señor Jesucristo. Amén.





martes, 17 de agosto de 2021

SÍ, AL EXTRANJERO. Deut. 14:21


SÍ, AL EXTRANJERO. Deut. 14:21

Ninguna cosa mortecina comeréis; al extranjero que está en tus poblaciones la darás, y él podrá comerla; o véndela a un extranjero, porque tú eres pueblo santo a Jehová tu Dios. No cocerás el cabrito en la leche de su madre.
Deuteronomio 14:21

REFLEXIÓN:

Llama poderosamente la atención cómo Dios sí les permite comer de lo muerto, a los muertos, tocante a su carente relación con Dios y a su ajenidad con Su pueblo.

Además de marcar, con esta clara distinción, una más patente diferencia y de asegurarles una más interiorizada identidad, con la permisividad de ofrecerle o venderle lo muerto a los extranjeros, aún se les está facilitando la función de ser luz en medio de los pueblos en fomento de esta posibilidad de trato con el de fuera.

Al parecer, por tierras cananeas, debieran de llevar a cabo una práctica tal como la que Dios prohíbe al final del verso, que era la de cocer al cabrito en la leche de su madre.

Clara prohibición por parte de Dios, y sobre este veto se encuentran dos formas más populares de interpretarlo:

En la primera se entiende que se trataba de una práctica pagana en la cual cocían el cabrito en la leche de su madre para usar este caldo resultante como riego para las tierras, así a modo ritual mágico, esperando que fuera fértil.

La segunda mantiene que la palabra Hebrea usada para "leche" requiere  exactamente de las mismas letras que el vocablo usado para "grasa".
De manera que el mandato original estaría diciendo así: "no cocerás al cabrito en la grasa de su madre". Ya que para dicha acción, irremediablemente debían ser sacrificados ambos animales, peligraría seriamente la continuidad de la especie. Y para reforzar esta versión se basa en otro mandamiento similar:

"Cuando encuentres por el camino algún nido de ave en cualquier árbol, o sobre la tierra, con pollos o huevos, y la madre echada sobre los pollos o sobre los huevos, no tomarás la madre con los hijos. Dejarás ir a la madre, y tomarás los pollos para ti, para que te vaya bien, y prolongues tus días."
Deuteronomio 22:6-7

Ambas formas de entenderlo tendrían su qué, aunque la primera opción ganaría peso, dada la ilación del mandamiento, el cual pretende una clara diferencia entre lo santo y lo pagano por medio de la dieta alimentaria.

APLICACIÓN:

Existen dos casos contrapuestos de hombres usados por Dios, en relación a guardar la dieta alimentaria y mezclarse con la sociedad pagana.

Sansón, quien hizo y comió lo que le pareció, sin tener en cuenta su nazareato. Cosa que le mantuvo viviendo una fuerte crisis de identidad, viéndose continuamente atraído por la sociedad enemiga y sus mujeres, y mezclándose  definitivamente con ellas.

Y Daniel, quien se guardó de contaminarse con la comida del rey desde su llegada a palacio de Nabucodonosor y durante toda su vida en la sociedad pagana.
Cosa que le aseguró mantenerse íntegro, de manera que a través de él, el nombre de Dios fue glorificado varias veces y reconocido por los reyes a los que le tocó servir.

ACCIÓN:

Igual que la nación de Israel debía servir de luz a las naciones y que Daniel guardó su integridad sirviendo de luz en medio de la oscuridad, ahora la iglesia es esa portadora de luz en la tiniebla.

Dios no nos ha mandado a apartarnos en nuestra burbuja ni en lo alto de un cerro o enel hermetismo de cuatro paredes. Sino que salgamos al mundo y estemos en él, no siendo de él pero sirviendo de modo que podamos ser distinguidos y muchos puedan llegar, a través de nosotros, al conocimiento del evangelio de Cristo.

Entiendo que más de uno preferiríamos un trozo de tierra y una cabaña en lo alto de un monte antes que soportar ni media hora del vivir en el mundo, la cosa está en crearnos esa parcela de amor en Cristo, manteniendo nuestra identidad íntegra alimentándonos de Su palabra.

"Yo les he dado tu palabra; y el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo."
Juan 17:14-18.

Aunque la Palabra de hoy a más de alentarme, me confronta, preguntándome cuántas son las veces que me dejo embaucar en distracciones seculares, que me hacen confundir la identidad, dejando que el mundo atenue el testimonio de Cristo en mí.

Y cierro mi reflexión con el siguiente pasaje:

"Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse."
Daniel 1:8.







ACTITUD VICTORIOSA, 2 Crónicas 20:15-17

ACTITUD VICTORIOSA, 2 Crónicas 20:15-17 Y dijo: Oid, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén , y tú, rey Josafat. Jehová os dice así: N...