sábado, 31 de julio de 2021

MANTENIDOS ‎POR ‎LA ‎PROMESA, ‏Deut. ‏9:27-29.


MANTENIDOS POR PROMESA, Deut. 9:27-29.

Acuérdate de tus siervos Abraham, Isaac y Jacob; no mires a la dureza de este pueblo, ni a su impiedad ni a su pecado, no sea que digan los de la tierra de donde nos sacaste: Por cuanto no pudo Jehová introducirlos en la tierra que les había prometido, o porque los aborrecía, los sacó para matarlos en el desierto. Y ellos son tu pueblo y tu heredad, que sacaste con tu gran poder y con tu brazo extendido.
Deuteronomio 9:27-29

REFLEXIÓN:

Si bien, Dios conocía de sobras que toda aquella generación rebelde acabaría pereciendo en el desierto, por amor de Sí mismo, según la promesa a los patriarcas y a causa de la intensa mediación de Moisés por cuarenta días y cuarenta noches en ayuno total, aún los mantuvo sin destruirlos, vagando cuarenta años por el desierto, de manera que fuera su propia incredulidad y rebeldía lo que los fuera acabando.

APLICACIÓN:

La santidad y justicia de Dios no admite el más mínimo pecado delante de Su presencia.

Quiero decir con esto que ninguno de nosotros es capaz de acercarse sin pretender acabar desintegrado a causa de Su gloriosa y santa presencia.
Pero a Dios, que es Soberano, le ha placido mantener la existencia del hombre por amor de Sí mismo, según su eterno plan de reinado sobre la tierra y trayendo al Mesías, su Unigénito Hijo el Señor Jesucristo, a vivir en calidad de hombre, para morir en calidad de pago en remisión total por el pecado de toda la humanidad y resucitar al tercer día para destruir la acción de la muerte y revertirla en todo aquel que cree en Su nombre.

De este modo ahora el hombre puede acercarse a Dios, y no sólo eso, sino que aún el Santo Espíritu de Dios viene a hacer morada en él, por cuanto a aceptado el perdón a través de Su Hijo siendo así su vida redimida con el precio de la sangre de Cristo derramada en la cruz del calvario.

La promesa de vida eterna en Cristo Jesús es firme, inamovible, por lo que todo aquel que cree en el Hijo tiene vida eterna, pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida sino que la ira de Dios está sobre él. (Esto lo leemos en Juan 3:36).

Así que el que ha creído en Jesús, es salvo desde ese mismo momento, y nada ni nadie puede revertir esta salvación.

Ahora bien, hasta el creyente, que ha sido salvo por Cristo Jesús, aún puede pecar y puede suceder que lo haga deliveradamente, en conocimiento de las consecuencias que esto conlleva.

En este caso, Dios no le quita la vida que le ha sido otorgada en Cristo, pero sí que ha preparado un tribunal por el que todo cristiano va a tener que pasar para dar cuenta de sus obras, sean buenas o malas, llevadas a cabo desde el día de su conversión.

La conclusión es que a Dios le ha placido darnos rescate y vida eterna, pero no para continuar viviendo dejados llevar por las concupiscencias, sino con un propósito principal, que es el de servirle para Su gloria y honra, y ese servicio de adoración se ejecuta llevando a cabo la función por la que permite la existencia de la iglesia en el mundo, que es la de expandir la luz de Cristo, que es el evangelio de salvación, a todo el mundo para que puedan creer en Él, arrepentirse, aceptarlo y ser salvos.

Y si la obediencia trae consigo promesa de corona, la desobediencia trae consigo la vergüenza que se habrá de pasar ante el tribunal de Cristo, por no haber acatado la única misión que se nos ha dado aquí en la tierra, por la cual somos salvos, que es la de propagar la gracia de Dios con el anuncio de la reconciliación en Cristo Jesús.

ACCIÓN:

Leída la intervención de Moisés por guardar al pueblo del castigo inminente de muerte por la ira de Dios sobre ellos, no puedo dejar de pensar que no soy yo mejor que ninguno de los de esa generación, sino que por gracia de Dios a través de Su Hijo se me ha liberado de la esclavitud de la muerte y me ha sido dada la promesa de vida eterna.

Y recuerdo estas palabras de Pablo a Tito:

"Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros. Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres, nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador, para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna."
Tito 3:3-7

Lo único que puedo hacer es estarle eternamente agradecida y propagar la gracia de Dios para que otros puedan beneficiarse, dejando de ser objetos dignos de recibir la ira de Dios para disfrutar eternamente de Su gloriosa presencia.

Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, gracias por todo Tu amor y misericordia, trayéndonos a Cristo por mediador y para que a través de Él obtengamos Tu perdón y accedamos a Tu presencia. Que Tu Santo Espíritu me enseñe a vivir según es Tu voluntad abriéndome al entendimiento de Tu palabra, para que mis obras no caigan en saco roto, mas surtan mucho fruto que entregarte cuando me encuentre en Tu presencia. Perdóname por todo este tiempo de inactividad y de ociosidad sin haber atendido al propósito que tienes para conmigo, y úsame para Tu gloria y honra. En el nombre de Jesús. Amén. 








viernes, 30 de julio de 2021

NO HAY TEMOR, Deut. 7:17-18


NO HAY TEMOR, Deuteronomio 7:17-19.

Si dijeres en tu corazón: Estas naciones son mucho más numerosas que yo; ¿cómo las podré exterminar? no tengas temor de ellas; acuérdate bien de lo que hizo Jehová tu Dios con Faraón y con todo Egipto; de las grandes pruebas que vieron tus ojos, y de las señales y milagros, y de la mano poderosa y el brazo extendido con que Jehová tu Dios te sacó; así hará Jehová tu Dios con todos los pueblos de cuya presencia tú temieres.
Deuteronomio 7:17-19

REFLEXIÓN:

Aunque ya se les ha informado que las naciones que Dios les va a entregar son mayores y más poderosas que Israel, es inevitable que a ellos les pueda surgir la duda y el temor, una vez se encuentren delante de cada una de ellas.

Así que este inciso va a sacarles de ese estado y a devolverlos a la seguridad que aporta saberse receptor exclusivo del favor del Todopoderoso Dios, el Creador de todas las cosas.

APLICACIÓN:

La vida del creyente es singular, ya que no se rige, como el resto del mundo, por las circunstancias físicas y terrenales. Aunque éstas les afecta de igual manera en el cuerpo, en el pensamiento se le ha dotado de la mente de Cristo, que conforme  madura en el espíritu, va ocupando cada vez más espacio dentro suyo, hasta que llegue el día en que sea un vivo reflejo del Señor, en su cuerpo glorificado.

Mientras tanto, no podemos evitar que nos surjan dudas o temores, si experimentamos enfermedad, dolor o alguna situación que sugiera peligro para la integridad de nuestro cuerpo de carne, aún conociendo que nuestro beneficio y mayor anhelo es librarnos de él y hallarnos en la presencia del Señor.

Siendo sensatos, debemos reconocer que nos dejamos amedrentar más a menudo de lo que debiéramos,  por cuestiones que atañen a lo físico y terrenal. Dios conoce nuestras debilidades y por ello ha dejado a nuestro alcance Su perfecta palabra que nos alienta en momentos de desánimo o incertidumbre, en la cual, Pablo resume su experiencia por tal de demostrar que la integridad espiritual no se ciñe a una vida de bienestar terrenal, sino más bien, se fortalece en las adversidades.

"De los judíos cinco veces he recibido cuarenta azotes menos uno. Tres veces he sido azotado con varas; una vez apedreado; tres veces he padecido naufragio; una noche y un día he estado como náufrago en alta mar; en caminos muchas veces; en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de mi nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos; en trabajo y fatiga, en muchos desvelos, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez; y además de otras cosas, lo que sobre mí se agolpa cada día, la preocupación por todas las iglesias. ¿Quién enferma, y yo no enfermo? ¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno? Si es necesario gloriarse, me gloriaré en lo que es de mi debilidad."
2 Corintios 11:24-30

Y por si aún pudiéramos pensar que el favor de Dios no está de nuestro lado en medio de las dificultades, más claro lo deja Pablo en las siguientes letras:

"¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? (...)
¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? (...)
Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro."
Romanos 8: 31-32, 35 y 37-39.

ACCIÓN:

Habiendo leído, me pregunto si hoy la enfermedad o los problemas van a debilitar mi estado de ánimo o si voy a asirme de la perfecta palabra de Dios para mantenerme firme en la fe, con los cimientos anclados y asegurados en mi roca que es Cristo.

Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, gracias te doy por Tu perfecta Palabra que me alienta justo cuando más me hace falta, en medio de los achaques en la salud física, cuando mi fe se ve afectada por las dudas o por la tentación de buscar respuestas fuera de Ti, sabiendo en Quien  y a qué nivel, deposité mi confianza desde el primer día que me rescataste de las tinieblas a Tu luz admirable en Cristo Jesús, mi Señor, y Tu Amado Hijo. Pues hoy te pido que aumentes mi fe y la fortalezcas por tal de continuar manteniendo esta plena confianza en que tienes control total sobre todas las cosas que me incumben, aceptando lo que haya de venir, sea bueno o malo, y por proceso o disciplina, a fin de continuar forjándome en el carácter de Cristo, para poder servir de ejemplo y testimonio a muchos para Tu gloria y honra. En el nombre de Jesús. Amén. 







jueves, 29 de julio de 2021

DON INMERECIDO, Deut. 7:7-8.


DON INMERECIDO, Deuteronomio 7: 7-8.

No por ser vosotros más que todos los pueblos os ha querido Jehová y os ha escogido, pues vosotros erais el más insignificante de todos los pueblos; sino por cuanto Jehová os amó, y quiso guardar el juramento que juró a vuestros padres, os ha sacado Jehová con mano poderosa, y os ha rescatado de servidumbre, de la mano de Faraón rey de Egipto.
Deuteronomio 7:7-8

REFLEXIÓN:

A Moisés le pareció necesario abrir este paréntesis, para que quede claro que no hay nada de qué gloriarse en ellos mismos sino en Dios.

Así que en prevención de que no vayan a jactarse luego de sus logros, como si de ellos hubiera dependido todo y por sus propios méritos, no solamente les va a restar importancia, sino que aún habla de ellos como lo irrisorio de entre la sociedad.

Para constatar la afirmación no hay más que, en mirada retrospectiva, reconocer que su permanencia y crecimiento se deben única y exclusivamente al favor de Dios y porque Él lo quiso así en Su soberana voluntad.

APLICACIÓN:

(En el plano terrenal hacemos uso de nuestras capacidades físicas e intelectuales para lograr objetivos concretos, ya sean a nivel académico, social o profesional. Cuando logramos uno de estos objetivos nos jactamos por el esfuerzo aplicado o por la mayor o menor dificultad que nos ha supuesto obtenerlo.)

En el plano espiritual andamos muertos, sin un objetivo establecido, deambulando en el lodazal del pecado y dejándonos caer por gravedad hacia el despeñadero de la muerte. Pero a Dios le ha placido mandar a Su Hijo para dar pago por todo el pecado del mundo a través de su sacrificio en la cruz del calvario y habiendo resucitado al tercer día, liberarnos también de las garras de la muerte.

Dios ha establecido que, como no hay nada que el hombre pueda hacer por sus propios medios para zafarse de la acción del pecado y de la muerte, pueda acceder al perdón y a la vida eterna a través del Señor Jesucristo, con tan sólo creer en Él y aceptar este don inmerecido.

Por tanto, a quienes hemos creído, se nos ha insuflado la vida por el Espíritu Santo y sumergiéndonos en la identidad de Cristo, somos hechos nuevas criaturas en Él. 

Ahora bien, a pesar de haber sido liberados del pecado y de la muerte en el plano espiritual, nuestra naturaleza carnal aún se ve afectada por estos dos factores. De modo que no es de extrañar que nuestro viejo hombre, es decir, nuestra naturaleza carnal, se quiera jactar de ser o de jugar un papel más importante delante de Dios que el resto de los hombres.

Y como Dios aborrece al corazón altivo  mas al humilde lo tiene en su cuidado, nos advierte y nos recuerda en Su palabra:

Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
Efesios 2:8-9

Y aún, por si acaso este don inmerecido aún nos lleva a jactarnos de ser especiales por haberlo recibido, también nos da esta Palabra:

Porque lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres. Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia. Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención; para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.
1 Corintios 1:25-31

ACCIÓN:

Tras la lectura y meditación de hoy, mi corazón se compunge y en confrontación por la Palabra recibida, sólo me queda mantener la cabeza gacha, a causa de la vergüenza por mi desfachatez, al haberme pensado mejor que aquel transeúnte malhablado o que aquella timadora del mercado... Siendo que ni mejor ni peor, sino que me encuentro siendo lo vil y lo menospreciado y aún así, por Su inconmensurable amor, Dios tuvo a bien pagar por mis pecados en la persona del Señor Jesucristo, igual que por los de aquellos a quien me he atrevido a mirar por encima del hombro, jactándome de santidad como si por mérito propio la hubiera logrado.

Y sólo me queda orar:

Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, en agradecimiento por Tu perfecta palabra que me confronta, me corrige y endereza, presento mi corazón grandemente avergonzado y arrepentido de mis jactancias. Te doy gracias, una vez más por este don inmerecido de la vida en Cristo y te pido que me ayudes a mostrar Tu infinito amor a los demás tal y cual me lo has mostrado a mí para que puedan disfrutar también de Tu gracia. Mi Eterno Padre celestial, a Ti sea siempre toda la gloria la honra y la alabanza. En el nombre de Tu amado Hijo y mi Señor Jesucristo. Amén. 


miércoles, 28 de julio de 2021

INSTRUCCIÓN Y MOTIVO, Deut. 7:1-6


INSTRUCCIÓN Y MOTIVO, Deuteronomio 7:1-6.

Cuando Jehová tu Dios te haya introducido en la tierra en la cual entrarás para tomarla, y haya echado de delante de ti a muchas naciones, al heteo, al gergeseo, al amorreo, al cananeo, al ferezeo, al heveo y al jebuseo, siete naciones mayores y más poderosas que tú, y Jehová tu Dios las haya entregado delante de ti, y las hayas derrotado, las destruirás del todo; no harás con ellas alianza, ni tendrás de ellas misericordia. Y no emparentarás con ellas; no darás tu hija a su hijo, ni tomarás a su hija para tu hijo. Porque desviará a tu hijo de en pos de mí, y servirán a dioses ajenos; y el furor de Jehová se encenderá sobre vosotros, y te destruirá pronto. Mas así habéis de hacer con ellos: sus altares destruiréis, y quebraréis sus estatuas, y destruiréis sus imágenes de Asera, y quemaréis sus esculturas en el fuego. Porque tú eres pueblo santo para Jehová tu Dios; Jehová tu Dios te ha escogido para serle un pueblo especial,más que todos los pueblos que están sobre la tierra.
Deuteronomio 7:1-6

REFLEXIÓN:

(Por si acaso llegaran a pensar que Dios no repara en medir fuerzas, ya lo deja bien claro, nombrándolas y todo, hay al menos siete naciones mayores y más poderosas que Israel, al otro lado del Jordán.)

Para Dios la potencia del hombre no es nada. Él es quien entrega estas naciones a Su pueblo para que las acabe por completo.

Y da paso a un par de instrucciones muy concretas, las cuales el pueblo ha de acatar según las dicta a Moisés, prevenidas con sus porqués, para que no pueda decir luego "no sabía, no entendía".

La primera instrucción tiene que ver con el trato personal, diplomático y cultural con estas naciones, el cual tiene que ser nulo.

La segunda se centra en el ámbito místico y religioso, destruyéndolo por completo sin que quede atisbo de ello.

Los motivos son claros: la infidelidad del hombre para con Dios y la soberanía de Dios para con la elección de un pueblo, el cual quiere que sea santo: apartado y diferente a los demás.

APLICACIÓN:

Jesús vino a liberarnos de ataduras mucho mayores y más potentes que todas nuestras capacidades para librarnos de ellas. A través de su perfecto sacrificio en la cruz del calvario, derrotó la acción del pecado y con su resurrección al tercer día aniquiló la irreversibilidad en la que nos encontrábamos a causa de la muerte, abriendo ante nosotros la puerta a la vida eterna, la cual es Cristo.

Desde entonces a todo aquel que en Él cree le es dada la potestad de ser hecho hijo de Dios en Cristo Jesús, quien lo justifica delante de Dios y da vida a su espíritu, hasta entonces muerto a causa del pecado, esta es una nueva identidad por sobre la naturaleza carnal y corruptible que perece irremediablemente.

Una vez somos hechos nuevos en Cristo   aquellas ataduras que nos impedían dejar de pecar, simplemente desaparecen y aparece en nosotros la capacidad de desechar de nuestras vidas aquellas cosas que solo atañen a los deseos de la carne, enfocándonos en nuestra nueva identidad espiritual que es dada en Cristo por el Espíritu Santo, quien pone la voluntad, la gallardía y la potencia necesarias para vencer a diario la batalla interna que se genera entre los deseos de la carne y los del Espíritu, pues son contrarios.

Y para que hallemos victoria y no andemos cayendo de pecado en pecado en cada tentación que se nos pase por delante, Dios nos instruye a través de Su palabra, nos aconseja y nos mantiene en la santidad donde nos posicionó el día en que aceptamos ser perdonados en Cristo, apartados y distinguidos del resto del mundo.

A continuación, un pasaje muy significativo, referente al vivir cristiano y a su santidad en Cristo.

En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.
Efesios 4:22-24

Dios es el mismo ayer, hoy y siempre. Y de la misma manera que instó al pueblo de Israel a no mezclarse con nada pagano ni inmiscuirse en sus culturas por tal de mantener su santidad y su identidad en Él, ahora nos exhorta a que dirijamos la mirada a Cristo y no al mundo, para que se evidencie la obra redentora que hizo en nosotros, apartándonos para Sí, poniendo sobre nosotros Su identidad.


No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Dios, Y ellos serán mi pueblo. Por lo cual, Salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, Y no toquéis lo inmundo; Y yo os recibiré, Y seré para vosotros por Padre, Y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso.
2 Corintios 6:14-18

ACCIÓN:

Después de la reflexión de hoy me pregunto si estoy haciendo un buen uso de mi libertad en Cristo o si por el contrario, (al saber que mi vida es justificada en Él, y Su acción redentora es permanente por cuanto es Fiel y Verdadero quien promete y da vida eterna a quien cree en Él), estoy echando mano de mi pasada forma de vivir y del amplio surtido de tentaciones que ofrece este mundo, mezclando lo santo con lo inmundo, escondiendo mi distinción como propiedad de Cristo.

Es hora de ser firme y determinante, sabiendo que por cada momento que ocupo mimetizándome con los que no conocen a Cristo, más almas perecen sin Él, y Dios nos pedirá cuentas por haber privado a otros de su salvación cuando nosotros sí tuvimos ese privilegio.

Y como último apunte:

"Hermanos míos, que vuestra fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo sea sin acepción de personas."
Santiago 2:1.







martes, 27 de julio de 2021

PARA LA POSTERIDAD, Deut. 6:20-25.


PARA LA POSTERIDAD, Deuteronomio 6:20-25.

Mañana cuando te preguntare tu hijo, diciendo: ¿Qué significan los testimonios y estatutos y decretos que Jehová nuestro Dios os mandó? entonces dirás a tu hijo: Nosotros éramos siervos de Faraón en Egipto, y Jehová nos sacó de Egipto con mano poderosa. Jehová hizo señales y milagros grandes y terribles en Egipto, sobre Faraón y sobre toda su casa, delante de nuestros ojos; y nos sacó de allá, para traernos y darnos la tierra que juró a nuestros padres. Y nos mandó Jehová que cumplamos todos estos estatutos, y que temamos a Jehová nuestro Dios, para que nos vaya bien todos los días, y para que nos conserve la vida, como hasta hoy. Y tendremos justicia cuando cuidemos de poner por obra todos estos mandamientos delante de Jehová nuestro Dios, como él nos ha mandado.
Deuteronomio 6:20-25

REFLEXIÓN:

Y por boca de Moisés Dios muestra a sus oyentes el propósito principal de Sus mandamientos y qué espera de Su pueblo a través de ellos.

Porque una nación sin memoria ni historia no tiene identidad, ellos recordarán para la posteridad de dónde han salido y las grandes maravillas y milagros que ha hecho Dios por rescatarlos de Egipto.

Sólo de ese modo el pueblo se puede asegurar una actitud humilde, receptiva y agradecida ante Dios, reconociendo que sin Él simplemente hubiera perecido en manos de Faraón.

APLICACIÓN:

(Al hombre le es sumamente fácil olvidar sus miserias cuando su suerte le lleva al bienestar, a la ociosidad y al gran abanico de opciones para satisfacer sus concupiscencias.)

Tan sólo bastó una sola generación después de Josué para atravesar cerca de 300 años de olvido, donde Dios tuvo que ir enviando a Jueces para mantenerlos, aunque sea, ya que sin este aporte simplemente el pueblo de Dios se habría autodestruído por su arrogancia y testarudez, disolviéndose en la idolatría.

Y no teniendo suficiente, la falta de esfuerzo por rememorar de donde han salido, aún después de la etapa en que decidieron ser gobernados por reyes de carne y hueso antes que por Dios mismo, cayeron de nuevo en otra gran etapa de olvido, por más de cuatrocientos años en el que no intervino Dios más que con Su silencio, sin enviar profetas desde Malaquías y hasta Juan el Bautista, quien lo rompería trayendo de nuevo a la memoria la promesa de Dios con su pueblo en un gran llamado al arrepentimiento.

Y aún estando Dios mismo delante de sus narices en la persona del Hijo, los judíos tendrán la desfachatez de renegar de su historia, borrando literalmente aquello que les ataca su orgulloso corazón, renegando de su identidad de esclavos rescatados de Egipto por mano poderosa de Dios.

"Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres?"
Juan 8:31-33

Hallamos pues que el tratar de borrar las miserias pasadas del hombre, hace de él una presa fácil de las corrientes humanistas, aquellas que sesgan y niegan por completo la existencia de Dios y la necesidad de acudir a Él y por ende, incapaz de reconocer la necesidad de arrepentirse aún si Dios mismo le habla en Su palabra.

Echando la vista al presente podemos reconocer la mano de los que ansían poder, borrando o alterando  acontecimientos pasados por tal de ensamblar una memoria histórica acorde a la ideología política y social que envanezca al hombre, atándolo a sí mismo y aún así se sienta paradójicamente libre.

Y como que jamás el hombre ha conseguido destruir la Biblia que es la Palabra de Dios. Su interés principal es la de negar su existencia enseñando una historia inventada como si fuera cierta, donde la humanidad no es sino fruto de la casualidad y donde prima su bienestar personal por encima de todo lo demás, confiando su salud antes a un remedio  científico o a las manos de un mortal que a Dios, el Único que tiene poder sobre la vida y la muerte.

Pero la Palabra de Dios no pierde autoridad por más que el hombre intente desprestigiarla, y ésta actúa en las conciencias de todos sin excepción, a diferencia de si el que recibe la Palabra la va a creer o la va a rechazar.

Lo mismo sucede con la Iglesia, que aún habiendo sido rescatada de la esclavitud del pecado, recibiendo perdón, una nueva identidad en Cristo y vida eterna en Él, aún peligramos en envanecernos en lo terrenal y pasajero, llevando una vida carente de fruto, si es que no ejercitamos una relación continua con Dios y con Su palabra mediante una vida devocional activa.

ACCIÓN:

Leo, medito y me dispongo a recordar de dónde me sacó Dios cuando vino a mi rescate por mano del Señor Jesucristo. Esto me ayuda a corregir actitudes arrogantes que me hacen ver mejor que otros, y me mantiene el corazón en un estado de humildad y contrición, esperando la voluntad de Dios y amando a los demás tal y como Dios me amó mientras estuve envuelta en mis pecados y delitos.

Si usted que lee es cristiano y hace tanto tiempo que le rescató el Señor, que ha olvidado cómo fueron sus primeros pasos en Él y cuánto le protegió Dios a pesar de su ignorancia, hasta hoy día con el conocimiento que ha ido adquiriendo conforme a su madurez, le invito a hacer memoria. Sírvanle estas palabras del Señor dada a los Efesios:

"Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los malos, y has probado a los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado mentirosos; y has sufrido, y has tenido paciencia, y has trabajado arduamente por amor de mi nombre, y no has desmayado. Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido."
Apocalipsis 2:2-5

Si es que usted ha leído estas palabras pero aún no conoce sobre el Señor Jesucristo. Sepa que Él siendo Dios vino a este mundo como hombre a morir por los pecados de toda la humanidad, que usted es un pecador como yo, solamente que yo creí en Cristo y ahora soy libre en Él de la esclavitud del pecado. Si reconoce la necesidad de ser rescatado del pecado, crea en el Señor Jesucristo y Él le dara una nueva vida. Si por el contrario, le parece que no necesita de nadie y ya se siente libre y tranquilo con su forma de vivir, le acompaño con las siguientes palabras:

"Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento."
Lucas 5:31-32

lunes, 26 de julio de 2021

ESPECIAL INCISO, Deut. 6:13-19.


ESPECIAL INCISO, Deuteronomio 6:13-19.

A Jehová tu Dios temerás, y a él solo servirás, y por su nombre jurarás. No andaréis en pos de dioses ajenos, de los dioses de los pueblos que están en vuestros contornos; porque el Dios celoso, Jehová tu Dios, en medio de ti está; para que no se inflame el furor de Jehová tu Dios contra ti, y te destruya de sobre la tierra. No tentaréis a Jehová vuestro Dios,como lo tentasteis en Masah. Guardad cuidadosamente los mandamientos de Jehová vuestro Dios, y sus testimonios y sus estatutos que te ha mandado. Y haz lo recto y bueno ante los ojos de Jehová, para que te vaya bien, y entres y poseas la buena tierra que Jehová juró a tus padres; para que él arroje a tus enemigos de delante de ti, como Jehová ha dicho.
Deuteronomio 6:13-19

REFLEXIÓN:

De entre los tres primeros mandamientos, Moisés va a hacer especial inciso, por tal de que no pueda haber lugar a duda y a mala interpretación.

Pero como las malas interpretaciones de los mandamientos se han dado más bien por la falta de disposición a obedecerlas que por la dificultad de sus letras, no solamente les dará una breve anotación explicativa sobre ellos, sino que la va a acompañar con una clara exhortación a la obediencia, trayendo al recuerdo la incredulidad de sus padres e incentivándolos con el favor de Dios para con quienes le obedecen.

Leyendo el pasaje, llama poderosamente la atención cómo las corrientes más ortodoxas del judaísmo ante el tercer mandamiento, tocante al no tomar el nombre de Jehová en vano, antes de obedecerlo tal y como la instrucción indica, prefirieran directamente borrarlo por completo, y así continuar con sus costumbres sin miedo a nombrarlo ni para bien ni para mal. Cuando el texto indica explícitamente que Dios ordena que solamente en Su nombre han de jurar, por cuanto Él espera que se le rinda temor y servicio en exclusiva por parte de Su pueblo.

Otro especial inciso el de la presencia de Dios en medio de Su pueblo, por si se les ocurriera hacer como sus padres, el tentarlo en el desierto preguntando: "¿Está o no está Dios con nosotros?"

APLICACIÓN:

Del mismo modo que Moisés parecía estar dando aclaraciones sobre la interpretación de algunos mandamientos, por evitar el mal uso de ellos, así al Señor Jesucristo le tocó sumergirse en ellos durante el Sermón del Monte, por tal de devolverles el correcto sentido, tal y cual los mandó grabar en piedra en el Sinaí. 

Podemos ver cómo el Señor, tras el abuso y el mal uso de los juramentos hasta es fecha, jurando por cualquier cosa que les pasase por la cabeza y a la ligera, acaba limitándoles a un "sí, sí, no, no".

"Además habéis oído que fue dicho a los antiguos: No perjurarás, sino cumplirás al Señor tus juramentos. Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera;ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey. Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello. Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede."
Mateo 5: 33-37

Además, Jesús encierra en una frase el propósito de los mandamientos el cual es el de intentar la perfección en el hombre a través de su cumplimiento, y así es de claro el Señor:

"Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto."
Mateo 5 48.

Se halla pues que la Ley de Moisés demuestra al hombre lo imposible que es ser perfecto por sus propios medios, aún existiendo un detalle de instrucciones para conseguir llevar a cabo esta perfección. Tanto así que sólo ha habido un hombre capaz de cumplir la Ley, y este es Jesús, Dios hecho hombre quien viviendo como tal, moriría cual cordero que va al matadero sin oponer resistencia resucitando al tercer día y ascendiendo a la diestra del Padre, como Rey de reyes y Señor de señores... Todo esto para que, los que en Cristo hemos creído, podamos ser perfectos en Él.

ACCIÓN:

Tomo las palabras de Jesús diciendo "oisteis que fue dicho..." durante el Sermón del Monte para darme cuenta que los mayores errores doctrinales y las más abominables herejías vienen por el oir una palabra distorsionada desde el inicio que, al no haberla contrastado, se sigue distorsionando de boca en boca, recibiendo amenes sin haber abierto la Biblia para examinarlo.

Y para que esto no suceda, me anoto el siguiente pasaje:

"Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo."
2 Pedro 1:19-21

Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, te doy las gracias por Tu perfecta palabra que me confronta y me lleva a atenderla más para no desviarme por caminos de engaños y errores doctrinales. Te pido que me des la sabiduría suficiente para poder entender, extraer y saber cómo aplicar las enseñanzas que dispones en Tu palabra, para mi correcto caminar en Tu voluntad. También te pido que en esa sabiduría me guardes de no compartir lo que no concuerda con el mensaje de las Escrituras y el perfecto evangelio de la salvación en Cristo Jesús , mi Señor y Salvador. Amén. 





domingo, 25 de julio de 2021

PREVINIENDO A SU PUEBLO, Deut. 6:10-12.


PREVINIENDO A SU PUEBLO, Deuteronomio 6:10-12.

Cuando Jehová tu Dios te haya introducido en la tierra que juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob que te daría, en ciudades grandes y buenas que tú no edificaste, y casas llenas de todo bien, que tú no llenaste, y cisternas cavadas que tú no cavaste, viñas y olivares que no plantaste, y luego que comas y te sacies, cuídate de no olvidarte de Jehová, que te sacó de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. 
Deuteronomio 6:10-12

REFLEXIÓN:

Dios conoce muy bien a Su pueblo, que es dado a olvidarse de Él cuando las cosas le van bien, perdiéndose en la idolatría.
Y le advierte, ya que no tiene de qué jactarse, a no hacerlo, recordándole que todo lo que van a recibir es por gracia, el disfrute del trabajo de otros.

Un detalle de lo que les espera: Una tierra, un hogar, provisión, sustento y fruto...
No porque lo merezca, sino porque así a Dios le ha placido, sacándole de la esclavitud de Egipto.

APLICACIÓN:

Desde que pecara Adán, el hombre nace encaminado a morir en el cuerpo y espiritualmente muerto y esclavo del pecado. Pero Dios ha mandado a Su Hijo, el Señor Jesucristo, quien ha pagado en Sí mismo el castigo por todo el pecado del mundo, para que podamos acudir a Él y ser libres.

Y a los que creemos en Él, no solamente nos libera de la esclavitud del pecado, sino que resucitando al tercer día, anula la acción de la muerte espiritual para proveernos de  vida eterna en Cristo.

Además adquirimos de forma totalmente inmerecida, una nueva identidad en Él, (pues nuestra vida ahora lleva Su nombre, por cuanto hemos sido comprados con Su sangre), un hogar en Su presencia, provisión en el Padre, sustento en el Hijo y fruto en el Espiritu Santo.

"Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, (...) aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús, (...).
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas."
Efesios 2:1, 5-6, 8-9.

Y como Pablo dice que Dios es quien produce en nosotros así el querer como el hacer por Su buena voluntad, (Filipenses 2:13), no tenemos de qué jactarnos ni disolvernos en arrogancia olvidándonos del Único benefactor en nuestras vidas, que es Cristo Jesús, Señor nuestro.

ACCIÓN:

Porque la arrogancia trae amargura al hombre, ya que ésta eleva su corazón por encima de los demás, privándole de la bendición de Dios, que se encuentra con los postrados en humildad y contrición...

Hoy es día de desechar toda jactancia y humillarme a los pies de Cristo por haberme pensado más inteligente y conocedor de Dios que los demás, por jactarme de ocupar más tiempo de oración que los demás y por ensoberbecerme como si de mí saliera la voluntad de obrar en favor del prójimo.

Y cierro mi reflexión con el siguiente pasaje:

"¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta sus obras en sabia mansedumbre. Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad; porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica."
Santiago 3:13-15









sábado, 24 de julio de 2021

SIEMPRE EN SUS CORAZONES, Deut. 6:4-9


SIEMPRE EN SUS CORAZONES, Deuteronomio 6:4-9.

Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.
Deuteronomio 6:4-9

REFLEXIÓN:

Y desde entonces esta instrucción se grabó en sus corazones, tanto así que hasta la fecha sus palabras componen el canto distintivo del judaísmo, el cual los ha mantenido como nación y salvaguardado de varios escenarios politeístas por el que han tenido que experimentar largos años de silencio de Dios para con Su pueblo.

Ya que Dios los sacó de Egipto, cultura severamente politeísta donde cualquier cosa era un dios, viviendo supersticiosamente y acreditándole cualidades divinas a todo excepto al verdadero Dios y Creador de todas las cosas;
ahora el pueblo necesitaba desintoxicarse de esa cosmovisión para poder entender cómo Jehová es Padre, Hijo y Espíritu Santo, sin dejar de ser Uno.

Y no es que el mismo pueblo decidiese guardar este tan importante lema distintivo, sino que por imposición de Jehová es que van a practicar la memorización sistemática a través del método de la repetición y del traspaso como patrimonio identitario de padres a hijos... Práctica que les mantiene posicionados como pertenencia de Dios aún cuando se encuentran en su estado más rebelde, no por voluntad de ellos sino por la soberanía Divina que así lo estableció.

APLICACIÓN:

Así como a Israel se le encomienda la propagación de estas palabras a lo largo de las generaciones, la iglesia tiene encomendado propagar el evangelio que un día recibió para que muchos puedan escucharlo y recibirlo también, añadiéndose al cuerpo de Cristo, en beneficio de su obra redentora en la cruz del calvario, hallando en Él una nueva identidad como hijos de Dios y a través de Él, la vida eterna.

Hallamos pues que la fórmula que Dios ha establecido para que se propague el evangelio entre los hombres para su salvación, se da a través de la iglesia, en propagación de Su palabra tal y como ha sido dada ya sea en forma oral o escrita. De modo que por ella el hombre llega al conocimiento de su estado pecaminoso y por ende, de su situación de muerte espiritual, y se le da la opción de cambiar ese escenario de muerte por el de vida eterna en Cristo Jesús, creyendo en Él y desligándose de su pasada manera de vivir esclava del pecado.

Y de esta manera se lo encomendó el Señor Jesús a sus discípulos una vez resucitado:

Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Mateo 28:18-20

Hicieron tal y como se les encomendó, y con palabras de Juan lo leemos así:

Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida (porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó); lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo.
1 Juan 1:1-3

ACCIÓN:

En conclusión veo que tan importante es recordar en Israel que Dios es Uno y que ha de ser primero en sus vidas, generación tras generación, como para la iglesia tener siempre presente la obra redentora de Cristo en nuestras vidas, siendo que ellas han sido compradas con Su sangre, pasadas de las tinieblas a Su luz admirable, de la cual ahora somos portadores.

Para mi introspeccion me anoto el siguiente pasaje:

Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos por amor de Jesús. Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.
2 Corintios 4:5-6

Y me pregunto si estoy obedeciendo al mandato del Señor para con la propagación del evangelio o si, de lo contrario, egoistamente me he guardado para mí este regalo escondiéndolo para que nadie lo vea, mostrando en su lugar mis cualidades personales.

Y cierro mi reflexión con estas palabras del Señor Jesucristo:

Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él. El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.
Juan 14:23-24






viernes, 23 de julio de 2021

MEDIADOR ENTRE DIOS Y EL PUEBLO, Deut. 5:23-27

MEDIADOR ENTRE DIOS Y EL PUEBLO, Deuteronomio 5:23-27.

Y aconteció que cuando vosotros oísteis la voz de en medio de las tinieblas, y visteis al monte que ardía en fuego, vinisteis a mí, todos los príncipes de vuestras tribus, y vuestros ancianos, y dijisteis: He aquí Jehová nuestro Dios nos ha mostrado su gloria y su grandeza, y hemos oído su voz de en medio del fuego; hoy hemos visto que Jehová habla al hombre, y éste aún vive. Ahora, pues, ¿por qué vamos a morir? Porque este gran fuego nos consumirá; si oyéremos otra vez la voz de Jehová nuestro Dios, moriremos. Porque ¿qué es el hombre, para que oiga la voz del Dios viviente que habla de en medio del fuego, como nosotros la oímos, y aún viva? Acércate tú, y oye todas las cosas que dijere Jehová nuestro Dios; y tú nos dirás todo lo que Jehová nuestro Dios te dijere, y nosotros oiremos y haremos.
Deuteronomio 5:23-27

REFLEXIÓN:

Esto le sucede al hombre cuando se le ofrece algo tan beneficioso que no lo quiere creer, pensando que algo malo debe haber detrás del ofrecimiento. Pues el pueblo se estaba beneficiando de un trato exclusivo y privilegiado con respecto al resto de la humanidad, pero ellos pensaron mal sobre las intención de Dios con mostrarse ante ellos por medio del fuego en el monte y temieron morir si se volvía a repetir la experiencia de escuchar la voz de Dios de entre las llamas.

Decidieron, pues, designarle a Moisés la tarea de mediación entre Dios y ellos, vaya a ser que el hombre muera, no les cayera a ellos la suerte.

APLICACIÓN:

Hay dos cosas que nos cuesta mucho hacer al ser humano: reconocer la verdad y enfrentarnos a ella. Así que en salvaguarda de esto que tan poco nos gusta hacer, nos montamos una pseudo verdad, una realidad alternativa acorde a nuestra moralidad contaminada por el pecado, que mantenga tranquilas las conciencias de los hombres.

Pero cuando el evangelio se expone en la sociedad, una luz se muestra en medio del tenebroso escenario del pecado, y las conciencias son golpeadas y llamadas al acercamiento a Dios, por medio del Señor Jesucristo, en arrepentimiento y aceptación del perdón a través de Su perfecto sacrificio en la cruz y del beneplácito de la vida eterna en Su resurrección de entre los muertos.

Asi que Dios nos provee del Perfecto Mediador por el cual acercarnos a Él, no por medio de hombre sino por medio de Sí mismo en la persona del Hijo.

Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad. Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo.
1 Timoteo 2:3-6

Pero esta verdad es tan sumamente buena que al hombre le cuesta creerla y decide añadirle complicaciones según entiende, en su razonamiento humano, que debería darse la labor de redención de sus pecados, por medio de penitencias, ceremonias o rituales hechos a su medida, que le evita tener que presentarse directamente ante la presencia de Dios con el corazón humillado y le permite continuar con su pecaminosa forma de vivir.

ACCIÓN:

Leyendo el pasaje y la reflexión extraída de este, me pregunto si estoy dirigiéndome a Dios directamente a través del Señor Jesucristo, único mediador entre Dios y los hombres, o si me he ideado otros tipos de mediación ya sean objetos o personas vivas o muertas, para paliar mis males de conciencia y apaciguar mi alma mientras me mantengo en mis pecados.

Hoy es día de reconocer la verdad y de desechar toda esta incredulidad y desconfianza hacia Dios. Hoy es día de reconocer a Cristo como único medio de acercamiento a Dios y como única opción de hallar remisión de pecados y vida eterna.

Señor, Dios Todopoderoso, gracias por esta palabra que atraviesa mi conciencia y me confronta tanto, que reconozco que no hay nada que yo pueda hacer por mis propios medios para hallar justificación delante de Ti. Hoy me arrepiento de mi arrogancia al pensar que podía presentarme delante de Ti por medio de una imagen o de una persona pecadora igual que yo, por tal de continuar viviendo en mis pecados sin sentirme golpeado en mi conciencia. En este momento te pido perdón y acepto el regalo de vida eterna que me das a través de Jesús, Tu Hijo amado, a quien acepto desde ahora como Señor, Salvador y Dador de vida. Te pido también que Tu Santo Espíritu more en mí y me guíe e ilumine mi entendimiento de Tu palabra desde hoy y para siempre, para saber cómo andar en Tu perfecta voluntad. Gracias por darme la vida y por ofrecerme la oportunidad de tenerte por Padre. En el nombre de Tu Hijo, y mi Señor, Jesucristo.
Amén. 




jueves, 22 de julio de 2021

DÉCIMO MANDAMIENTO, Deut. 5:21

DÉCIMO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5:21.

No codiciarás la mujer de tu prójimo, ni desearás la casa de tu prójimo, ni su tierra, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo.
Deuteronomio 5:21

REFLEXIÓN:

Porque el origen del pecado está en codiciar el bien ajeno, el último de los diez mandamientos va a englobar todos los demás, porque:

Si se codicia algo, se deja de tener a Dios en primer lugar, ergo, se tiene un dios ajeno delante de él.

También puede materializarse la idea codiciada en una persona u objeto, lo cual, si éste se está deseando más que a Dios, uno se está inclinando ante ello y sirviéndole, mientras que se encuentra esclavo del objeto codiciado.

La codicia lleva a muchos a perjurar, e incluso hubo aquél que descrito está en la Biblia, a quien la codicia le llevó a morir por transgredir el día de reposo cargando leña.

Por la consecuencia de la codicia se deshonra a los padres, se mata, se comete adulterio, se hurta e incluso uno se puede animar a dar falso testimonio contra el prójimo.

APLICACIÓN:

Cuando Dios creó al hombre, le proveyó de todo lo necesario para su vida y bienestar. Pero Eva codició el fruto del único árbol del cual estaba prohibido comer, bajo condena de muerte. Asi que comió y aún le dió también a Adán, y de ahí entró el pecado y su consecuencia, que es la muerte, al mundo.

Así que no es de menospreciar el pecado de codiciar un bien ajeno.

Muchos ejemplos de pecados cometidos a raíz de la codicia hay en la Biblia, igual que también los hay en el día a día de esta sociedad.

Empezando por Eva, y siguiendo por Caín (ya que la envidia también se origina en la codicia), el hombre que cargó leña en día de reposo, Acán tomando del anatema para sí tras la caida de Jericó, David cometiendo adulterio con Betsabé y mandando a matar a su marido Urías, y los falsos testimonios animados a base de sobornos contra el Señor Jesucristo y contra Esteban... Son los casos más conocidos y todos tienen en común el codiciar un bien ajeno.

En la sociedad actual se nos anima a ser competitivos, no buscando el bien de los demás sino animándonos a ser mejores, a obtener mejores logros que los demás y a llegar a poseer cosas más valiosas en lo económico y social. Esto fomenta el individualismo, la ambición y embota la empatía casi anulándola por completo,  la cual es necesaria para poder ponernos en lugar del prójimo, compadecernos de él y ayudarlo en sus circunstancias. Sin embargo sí que nos capacita en codiciar sus bienes, ya que una educación basada en la competitividad tiene por objetivo visualizar el logro ajeno para superarlo o hacerse con él.

ACCIÓN:

Para la aplicación práctica y personal del pasaje de hoy, incluyo como aporte estos dos pasajes:

"No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece."
Filipenses 4:11-13

"No te impacientes a causa de los malignos, ni tengas envidia de los que hacen iniquidad. Porque como hierba serán pronto cortados,Y como la hierba verde se secarán. Confía en Jehová, y haz el bien;Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad."
Salmos 37:1-3


Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, te doy las gracias por la oportunidad de edificarme a través de Tu palabra, para que pueda conocerte mejor, corregir y desechar todo aquello que hago mal ante tus ojos, para que mis pasos sean cada vez más derechos en Cristo. Guarda mi corazón de observar y desear los bienes ajenos, asimismo guárdame de molestarme si me parece ver que los que te niegan viven mejor que yo en este mundo. Enséñame a contentarme, como Pablo, cualquiera que sea mi situación, recordándome el más valioso favor que me has dado y el Único esencial para la vida, que es la redención en Cristo, trayéndome paz verdadera y seguridad eterna en Él. Enséñame a tener un carácter  agradecido, generoso y desinteresado para con el prójimo, de manera que este pueda ver a Cristo en mí.
En el nombre de Jesús. Amén. 








miércoles, 21 de julio de 2021

NOVENO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5:20


NOVENO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5:20.

No dirás falso testimonio contra tu prójimo.
Deuteronomio 5:20

REFLEXIÓN:

Porque en la justicia de Dios no hay cabida a la mentira, es más, sin verdad, no puede haber justicia... Estas palabras que se grabaron en el Sinaí hoy las vuelve a repetir Moisés delante del pueblo: No dirás falso testimonio contra tu prójimo.

El falso testimonio puede darse de manera intencional, es este que se da a partir de una mentira proferida por el testigo. O de manera no intencional, que es la que se da cuando el testigo, estando mal enterado a causa de información tergiversada por terceros o por falta de atención a los hechos acontecidos, este da como veraz algo que no se ha dado según lo cuenta, convencido de estar dando un detalle cierto de lo que dice.

Así que podemos decir que este mandamiento no sólo les ordena no mentir, sino prestar atención a la verdad para no acabar siendo parte del engaño.

Porque lo mismo es el que peca a sabiendas como el que lo hace por ignorancia, pues la ignorancia no anula el pecado, se hace imprescindible que el que va a dar testimonio, lo haga en conformidad y en conocimiento de lo que va a exponer.

APLICACIÓN:

El falso testimonio atenta directamente contra la integridad moral e incluso física del denunciado. Y no solamente eso, sino que aún si se descubriera que el testimonio es falso, ya el daño causado por el arresto y la acusación, lo dejan marcado en la sociedad habiendo sido manchada su imagen desde ese momento.

Los dos casos de falso testimonio más graves descritos en la Biblia fueron perpetrados o planificados por los entendidos de las Escrituras y terminaron con la ejecución del denunciado.

El primer caso, que es el que lleva el peso de la justicia de Dios por sobre la injusticia del hombre, es cuando Jesús es arrestado y llevado a ser ejecutado a la cruz a causa de falso testimonio, promovido desde el corazón de los representantes del pueblo y entendidos de la Ley.
(Esto lo leemos en Mateo 6 :59-61).

En el segundo caso vemos a Esteban llevado al concilio, acusado falsamente por unos sobornados. Esteban, lleno del Espíritu Santo les habló desde Abraham y hasta sus desplantes a la Ley, cosas que enfurecieron a los oyentes hasta el punto de echarlo y apedrearlo hasta la muerte.
(Esto lo leemos en el libro de Hechos entre el 6:8 y el cap.7).

Estos dos casos abrieron boca a todo un despliegue de falsas acusaciones que se van dando desde la formación de la iglesia y hasta la fecha en el intento de que ésta desaparezca por completo del mundo. Cosa que sólo sucederá cuando el Señor se la lleve consigo a Su presencia.

Hallamos pues que el motivo principal de transgresión de este mandamiento no es la ignorancia o el desconocimiento del mismo o de las Escrituras, sino la maldad que hay en el corazón del hombre, por cuanto los que más procuraron la injusticia sobre Jesús, fueron los que conocían perfectamente que Él era el Mesías por el cumplimiento que dió a toda señal Mesiánica descrita antes por los profetas en las Escrituras y mostrada delante de sus narices.

Impacta ver cómo se dejaron sobornar aquellos que mandaron a la muerte a Esteban a causa del testimonio de su boca. También impacta ver cómo salieron falsos testigos que hicieron lo propio contra el Señor Jesucristo habiendo  testificado lo tergiversado de manera que a otros le pareciera cierto.

Gracias a Dios, el paso por la cruz de Cristo formaba parte de Su plan de salvación, trazado desde antes de la fundación del mundo. Así que, muriendo y resucitando al tercer día, nos liberó de la esclavitud del pecado y de la muerte. Y ahora podemos acceder todos al perdón y a la vida eterna por medio de la fe en el Señor Jesucristo.

ACCIÓN:

El Señor se llama a Sí mismo el testigo Fiel y Verdadero, y espera de nosotros que nuestro testimonio sea así como Él es, por cuanto llevamos Su nombre.

Leído y reflexionado el noveno mandamiento, me pregunto si estoy siendo leal en mi diario vivir con respecto a lo que testifica mi boca sobre mí, y si mi testimonio deja al Señor en el lugar que el pertenece, o testificando de Él en mi vida, me dejo en evidencia al no estar acompañados mis testimonios con hechos que los respalden.

Hoy toca hacer ejercicio de introspección, dejando este pasaje como último apunte en la reflexión:

El testigo falso no quedará sin castigo, Y el que habla mentiras no escapará.
Proverbios 19:5





martes, 20 de julio de 2021

OCTAVO MANDAMIENTO, Deut. 5:19


OCTAVO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5:19. 

No hurtarás.
Deuteronomio 5:19 

REFLEXIÓN: 

Allá se encontraba Moisés en la forma más escueta de decirles "no tomarás lo que no es tuyo con ánimo de apropiarte de ello y sin permiso de su verdadero propietario". 

(Sólo existe una cosa que Dios le ha placido que sea de nuestra propiedad y de nadie más, con toda la responsabilidad y consecuencia de su uso. 

Cuando Dios creó al hombre, lo puso en medio del huerto, en Edén, y le permitió disfrutar de todo lo habido, le dió una labor y le otorgó un lugar de distinción por sobre el resto de lo creado. 

Luego Dios le permitió comer del fruto de todo árbol del huerto, con excepción del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal, bajo amenaza de muerte. Adán solamente tenía que seguir las directrices igual como lo estaba haciendo con su labor de dar nombre a todos los animales. 

Pero Adán decidió desobedecer... El resultado hoy día lo estamos sufriendo la creación, que es la entrada de la muerte en el mundo. 

Esta es la única cosa de la que Dios nos hace poseedores por pleno derecho, según es Su voluntad: la capacidad de decidir libremente sobre nuestros actos en la vida, o lo que sería lo mismo, el libre albedrío.) 

Cuando el hombre se proclama poseedor de otra cosa que no sea el libre albedrío, éste está cometiendo hurto, pues se está adueñando de lo que no es suyo. 

Cuando Caín mató a Abel, Dios lo condenó a ser errante y extranjero en la tierra. Pero él se instaló y se hizo para sí con una ciudad, y le puso el nombre de su hijo, como suya. 

Cuando nació Nimrod, nieto de Cam, éste creció y se hizo poderoso en la tierra, se apropió para sí mismo de la gloria de los hombres, y se dió a sí mismo el derecho de gobernar sobre ellos. 

Estos son dos ejemplos de hurtos a Dios, que hoy día se cometen de forma sistemática. 

Lo que hay que recordar es que cuando un hombre hurta algo a otro hombre, no se lo está robando a éste, sino a Dios. Por cuanto nada nos pertenece, ni la propia vida, pues la pone Él. 

APLICACIÓN: 

Hallamos pues que, de todo lo que disfrutamos aquí en la tierra, nuestro es sólo el libre albedrío con toda la consecuencia de su uso. 

La consecuencia por el mal uso en la decisión de Adán la estamos sufriendo todos, marcados por la muerte espiritual y física. 

Pero a Dios le plació trazar un plan de salvación, esto es, una forma de revertir la condena, para permitirnos disfrutar de  vida eterna, además de dejar de encontrarnos en calidad de ladrones por cuanto es quitado de nosotros el pecado, que es lo que nos impedía disfrutar de los favores de Dios y de nuestra nueva identidad en Él, dada a nosotros, sin necesidad de ir hurtando nada. 

Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.
1 Timoteo 1:15. 

Y ahora es cuando debemos hacer uso de esto que Dios nos ha dado, que es decidir si queremos creer o no en Jesús, decisión que marcará nuestro destino para siempre. 

ACCIÓN: 

Si no has decidido creer aún en Jesús como Señor y Salvador tuyo, para ser perdonado de tus pecados y hallar la vida en Él, te acompaño con este pasaje: 

Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.
Hechos 17:30-31 

En cuanto a mí, y después de lo reflexionado, me pregunto si me estoy comportando con gratitud a Dios por todo lo que tengo o si de lo contrario, pretendo adueñarme de un tiempo que no es mío, no dedicándoselo a Él y mermando mi vida devocional a causa de ello. 

Padre Amado, gracias porque Tu palabra es tan perfecta que por muy escueta que sea es capaz de suplir completamente la necesidad de mi alma, confrontándome, mostrándome y dirigiéndome hacia la corrección de mis pasos para darlos cada vez más al compás de Tu voluntad. 
Te pido perdón por el atrevimiento de pretender organizar por mi propia cuenta el tiempo que Tú me das para que lo viva para Tu gloria y honra, queriendo apartar y apartándolo para mis intereses personales sin haberte siquiera pedido permiso. 
Señor, hoy te pido que me des la sabiduría necesaria para administrar sabiamente el tiempo que me das, para que surta mucho fruto y no deje de glorificar Tu santo nombre.  En el nombre de Jesús. Amén.






lunes, 19 de julio de 2021

SÉPTIMO MANDAMIENTO, Deut. 5:18


SÉPTIMO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5:18. 

No cometerás adulterio.
Deuteronomio 5:18 

REFLEXIÓN: 

(Tenemos delante de Moisés a un pueblo acostumbrado a los ídolos y a las costumbres paganas, de tal manera que han adquirido gran cantidad de ideas culturales y supersticiones de Egipto, que aún perduran en nuestros días. Por ejemplo, el símbolo al cual llaman "mano de Miriam" contra los males de ojo, o la estrella que llaman "estrella de David", plasmada en su bandera nacional, son dos signos visibles de infidelidad a Dios, pues no provienen de Él ni lo distinguen, sino que suponen referencias directas a dioses paganos y a creencias ocultistas.) 

Así que Dios va a ser muy claro y directo con este mandamiento, para que no les sea difícil de recordar, no cometerás adulterio. 

Entendemos con adulterio a la infidelidad dentro de la unión conyugal y también la podemos entender en lo espiritual, cuando se altera la fe añadiéndole cosas contrarias o ajenas a ella, cambiándole el sentido o eliminando su pureza. 

A lo largo de la historia Bíblica se han ido dando algunos casos de adulterio. El más nombrado puede ser el del rey David con Betsabé, quien fuera mujer de Urías, antes de mandarlo a muerte segura poniéndolo en primera fila en la línea de batalla... Por no hablar de las setecientas esposas del rey Salomón más sus trescientas concubinas, ¡qué barbaridad! 

APLICACIÓN: 

En el pueblo de Dios se entendía que el acto de acometer adulterio se daba cuando se materializaba la acción entre las personas participantes, pero el Señor Jesucristo también nombró este tema para dar su correcta interpretación: 

Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno. Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
Mateo 5:27-30 

Pues si en el pensamiento no se es fiel, cuanto menos se será en la práctica, tirando de hipocresía y engaños por tal de esconder los verdaderos sentimientos hacia su cónyuge. 

Y para evitar manchar la mente de pensamientos tales como codiciar a mujer o marido ajenos, el Señor nos ilustra con un ejemplo muy drástico, la necesidad de apartar tajantemente nuestra atención y curiosidad de sobre esa persona que despierta nuestras concupiscencias. 

ACCIÓN: 

Somos portadores de la luz de Cristo y testimonio de Su amor en nuestras vidas. 

En ejercicio de confrontación: 

Imaginemos que somos abanicos, aventando el amor de Dios al mundo, y por cada infidelidad, se hace un agujero por donde se escapa ese amor... ¿Podemos decir de nosotros, que somos un abanico eficaz, o más bien estamos sentenciados a ser olvidados en el cajón de los objetos inútiles de la casa? 

Por cada vez que dejamos de dirigir la vista a Cristo para preferir satisfacer muestras concupiscencias estamos provocando en nosotros un defecto que nos hace cada vez menos útiles en nuestra vida cristiana y pudiendo llegar a ser totalmente infructuosos. 

No sé usted, pero yo no quiero presentarme ante el tribunal de Cristo con las manos vacías, cuando me encuentre en Su presencia. 

Y si es el caso de que, al llevar a cabo nuestra concupiscencia, nos encontrarnos literalmente en situación de adulterio, cierro el pensamiento con el siguiente pasaje: 

¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo? ¿Quitaré, pues, los miembros de Cristo y los haré miembros de una ramera? De ningún modo. ¿O no sabéis que el que se une con una ramera, es un cuerpo con ella? Porque dice: Los dos serán una sola carne. Pero el que se une al Señor, un espíritu es con él. Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca. ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.
1 Corintios 6:15-20







domingo, 18 de julio de 2021

SEXTO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5:17.


SEXTO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5:17. 

No matarás.
Deuteronomio 5:17 

REFLEXIÓN: 

Más explícito no puede ser... 

Este mandamiento en concreto les deja claro que matar está mal. De modo que con un conciso "no matarás" lo decreta, sin más. 

Todos conocemos que "matar" significa privarle de vida a un ser vivo. En otras traducciones aparece la palabra "asesinar" con la intención de especificar la acción, como dirigida a hombre. 

APLICACIÓN: 

Tan explícito se veía, y aún tuvo que nombrarlo el Señor Jesús, durante el Sermón del Monte, para darle el correcto sentido porque, al parecer hasta en lo más concreto debían ser explicados la intención y el propósito de estas dos palabras grabadas en piedra. 

"Oísteis que fue dicho a los antiguos: No matarás; y cualquiera que matare será culpable de juicio. Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego. Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda."
Mateo 5:21-24 

Existen muchos motivos por los cuales se originan pensamientos homicidas en el corazón del hombre, que si se mantienen, acaban gestándose e incluso expresándose abiertamente el deseo de ver muerto a alguien. ¿ O acaso usted que lee, no deseó nunca la muerte de nadie, ya sea un criminal o alguien del que deseara vengarse, antes de conocer a Cristo?
Es por esta razón que el Señor les ilustra cómo han de zanjar cuanto antes la causa de desaveniencia entre dos o más personas. 

Por envidia mató Caín, por codicia y lujuria mandó matar David... 

Sobre este mandamiento la iglesia esta bien prevenida, por parte de Pablo, que indica a los de Colosas: 

"Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.
(...)
Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto."
Colosenses 3:8 y 12-14. 

ACCIÓN: 

Sin duda, excusa o más dilación, hoy me toca hacer ejercicio introspectivo en memoria de aquel conflicto sin resolver con un hermano, aquella persona que me causó antipatía, aquel amigo que me ofendió... De igual manera voy a ejercitar la memoria para recopilar mis acciones en lo acontecido hasta la fecha desde donde la memoria me dé, por si hallara algua causa mía por el que un hermano se pueda haber sentido mal. 
En ambos casos debo tratar de subsanar el entuerto practicando el perdón y pidiendo la disculpa, por tal de restablecer el principal mandamiento que me identifica con Cristo, que es el amor, y ofrecer así un buen testimonio de Su carácter en mí. 

Amado Padre, Señor y Dios Todopoderoso, 
gracias porque a diario hallo confrontación con Tu palabra, aliento e instrucción de vida, que me están llevando a despojarme de mucha carga que ni siquiera observaba lo tanto que me impedían continuar forjándome en el carácter de Cristo. Te pido perdón por los malos pensamientos hacia mis ofensores y te pido que me enseñes a amarlos así como Tú me amas a mi y a ellos, con este amor incondicional de Cristo, quien dió Su vida en la cruz por mí, pero también por ellos. Dame asimismo, sabiduría y valentía, y propicia un acercamiento con aquel que se ha ofendido conmigo, para que me pueda disculpar con él o con ella. Finalmente, Padre Amado, despierta en mi memoria, siempre, este mandamiento, para que pueda asociarlo a cualquier mal pensamiento que me pueda venir, por tal de eliminarlo de mi mente lo antes posible.
En el nombre de Jesús. 
- Amén. -






sábado, 17 de julio de 2021

QUINTO MANDAMIENTO, Deut. 5:16


QUINTO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5:16. 

Honra a tu padre y a tu madre, como Jehová tu Dios te ha mandado, para que sean prolongados tus días, y para que te vaya bien sobre la tierra que Jehová tu Dios te da.
Deuteronomio 5:16 

REFLEXIÓN: 

Respetar, distinguir y prestigiar son tres sinónimos de la palabra honrar, la cual trata de ensalzar lo bueno o cuanto menos, no descubrir lo malo, de los progenitores, con el fin de ir subsanando lo malo con lo bueno. De manera que la memoria generacional se vea afectada sólo en lo que incumbe en lo social. Cosa que inevitablemente puede quedar en la memoria, y no en lo íntimo de la unidad familiar, donde solo el afectado lo sabe y tiene opción de perdonarlo y ponerlo en el olvido. 

(Nadie escoge a su progenie, sino que Dios en ellos les hizo crecer simiente, fruto de su unión y los hizo convertirse en padres. Estos padres cada cual son como son según su personalidad, pero también según su moralidad, educación, creencia o incluso según el estigma social.) 

Ahora Dios les ordena que ellos marquen la diferencia con el mundo, no haciendo estas apreciaciones contra sus padres, sino que los mantengan siempre con el nombre limpio de juicio o crítica, practicando la obediencia hacia ellos, el agradecimiento y el perdón en todo lo que sea necesario, recordando que es Dios quien les hizo nacer acá o allá, en una familia u otra, y cada cual tiene un designio. 

Echando la vista a generaciones atrás, podríamos haber visto a un Booz enojado contra las mujeres extrangeras, ya que a causa de su madre, extrangera y además conocida como la ramera de Jericó, él se encontraba soltero a pesar de las buenas cualidades personales y sus propiedades descritas en el libro de Rut. Aún así, él vió a la moabita entre sus campos y la distinguió, la ayudó y trató de protegerla de los trabajadores, manteniéndola al márgen de ellos pero sustentada por orden de él, dejando caer grano para que tuviera qué recolectar. Esta es una actitud que honra en gran manera a quienes fueran su padre y su madre. Y que, a la vista está, le hizo prosperar no sólo en lo material, sino en lo espiritual y en lo tocante la promesa del Reino por cuanto, por su buen hacer, su nombre y el de sus padres quedarían grabados para siempre en la línea generacional del Mesías. 

APLICACIÓN: 

Quizá el cristiano quiera caer en pensar: "Bueno, esto se trata de un mandamiento expresado directamente al pueblo judío, por cuanto nosotros en Cristo no tenemos parte con él, siendo que en Cristo somos libres del yugo de la Ley de Moisés." Pero nada más lejos de la realidad, pues estando en Cristo, vamos  adquiriendo su carácter conforme le obedecemos, y su principal mandamiento para la iglesia es el amor. 

Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor.
Romanos 13:9-10 

Y en este cumplimiento debemos tener  parte, pues somos en Cristo y Cristo es el fin de la ley, por el que somos llamados a una justicia mayor, según expresó al pueblo, como requisito de entrada a Su reino. 

Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Mateo 5:20 

Y ahora deberíamos preguntarnos si existe en la iglesia el mandamiento explícito, como muestra de justicia y amor de Cristo. Y encontramos que Pablo lo parafraseó, en la fidelidad de su letra, para dirigirse a los creyentes Efesios: 

Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.
Efesios 6:1-3 

ACCIÓN: 

Este mandamiento me anda confrontando considerablemente, y quizá a alguien más que lo lea, por cuanto muchos somos los hermanos que, habiendo aceptado a Cristo como Señor y Salvador, hemos podido experimentar escenas de rechazo o de distanciamiento por parte de familiares y entre ellos, los padres que aún no conocen al Señor. 

Señor, Dios Todopoderoso y Padre Amado, gracias por Tu perfecta Palabra que me confronta y me muestra el camino a la perfección. Te pido que me perdones, pues, aunque pienso que ya está todo perdonado, a menudo se me olvida que el rechazo no proviene directamente de mis padres, sino de quien gobierna por el momento sus vidas, y deshonro sus personas expresando mi frustración hacia ellos en lugar de continuar enfocando el problema en el ámbito espiritual. Te pido, también, me sea dada sabiduría para gestionar esta lucha y mantenerme en obediencia a tu mandamiento, el cual es el amor según Tu voluntad y el carácter de Cristo. En el nombre de Tu precioso Hijo y mi Señor, Jesucristo. Amén. 






viernes, 16 de julio de 2021

CUARTO MANDAMIENTO, Deut.5:12-15.


CUARTO MANDAMIENTO, Deuteronomio 5: 12-15. 

Guardarás el día de reposo para santificarlo, como Jehová tu Dios te ha mandado. Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; mas el séptimo día es reposo a Jehová tu Dios; ninguna obra harás tú,ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu buey, ni tu asno, ni ningún animal tuyo, ni el extranjero que está dentro de tus puertas, para que descanse tu siervo y tu sierva como tú. Acuérdate que fuiste siervo en tierra de Egipto, y que Jehová tu Dios te sacó de allá con mano fuerte y brazo extendido; por lo cual Jehová tu Dios te ha mandado que guardes el día de reposo.
Deuteronomio 5:12-15 

REFLEXIÓN: 

Un reposo guardado por mandato, del cual no sólo se beneficia el que reposa, sino todo ecosistema sujeto a la acción de éste. De manera que en el día de reposo se puede experimentar una sensación de total paz y libertad sobre la nación. 

También les suponía, y lo sigue haciendo, por ser mandato firme para la nación de Israel, un recordatorio directo a la obra creacional de Dios, repartida y completada en seis días, cesando el séptimo de toda obra y santificándolo para Sí. 

Un marcador que les llevaría de contínuo al recuerdo de cómo hubo un día en que Dios los sacó de Egipto y les hizo oir por primera vez las palabras del que trata el primer relato de la creación siendo, todas y cada una de las obras diarias, un duro revés contra el politeísmo Egipcio al que se habían estado sometiendo por cuatro siglos. 

El concepto de reposo también supone a Israel el acceso a la tierra dada como heredad por promesa a Abraham, no sólo la primera entrada a las tierras de Canaán por medio de Josué, para con los hijos de los que salieron de Egipto pero no creyeron , sino un reposo que esperan con la llegada del Mesías y el disfrute total de la heredad en Su reino. 

Cuarenta años estuve disgustado con la nación, y dije: Pueblo es que divaga de corazón, y no han conocido mis caminos. Por tanto, juré en mi furor que no entrarían en mi reposo.
Salmos 95:10-11 

Y abre paréntesis el autor de la carta a los Hebreos diciendo así: 

Porque si Josué les hubiera dado el reposo, no hablaría después de otro día. Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios.
Hebreos 4:8-9 

APLICACIÓN: 

Este es el mandamiento peor entendido y  aplicado entre las religiones que deciden no observar a Cristo como suficiencia y perfección en la obra redentora del hombre. 

Se ciñen pues a éste, para subyugar al hombre, de nuevo, a la sombra de Quien ya consumó la obra del perfecto reposo. 

Siendo que para quien cree en el Señor Jesucristo, la Palabra de Dios dice claramente que este día, más las fiestas solemnes y los mandatos alimenticios al pueblo judío eran anuncio del Redentor, debemos esperar y entender que quien ha depositado su fe en Él ya no va a observar estas cosas que lo representaban, habiéndose beneficiado de la finalidad de este anuncio. 

Pablo les prevenía a los Colosenses de la siguiente manera, contra aquellos que pretendían desvirtuar a Cristo como único medio de salvación para el hombre: 

Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo, todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo.
Colosenses 2:16-17 

Así que hallamos que el que cree en el Señor Jesucristo descansa y se libera de las obras, espiritualmente hablando, por cuanto ha adquirido seguridad eterna en Él y por cuanto se encuentra en un contínuo día de reposo, siendo Cristo el Señor de este. Y Él mismo lo dijo así: 

Y si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes; porque el Hijo del Hombre es Señor del día de reposo.
Mateo 12:7-8 

ACCIÓN: 

Es un gran gozo leer sobre este mandamiento conociendo qué significa, qué implica para el pueblo judío y cómo se ejecuta en los creyentes a diario, en Cristo Jesús. 

Y como aporte a quien observa poner por obra este cuarto mandamiento, como  requisito y distintivo en su identidad religiosa, pensando que se obtiene favor de salvación por medio de ello, sean estas palabras: 

Porque en cierto lugar dijo así del séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día. Y otra vez aquí: No entrarán en mi reposo. Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes primero se les anunció la buena nueva no entraron por causa de desobediencia, otra vez determina un día: Hoy, diciendo después de tanto tiempo, por medio de David, como se dijo: Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones. (...) 
Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas. Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia.
Hebreos 4:4-7 y 10-11. 

Hoy es conveniente reflexionar, preguntándonos si de cierto hemos reposado de las obras, habiendo entrado en su reposo. 




ACTITUD VICTORIOSA, 2 Crónicas 20:15-17

ACTITUD VICTORIOSA, 2 Crónicas 20:15-17 Y dijo: Oid, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén , y tú, rey Josafat. Jehová os dice así: N...